Qué efecto traumático presentan los niños separados de sus padres en la fronteras
Los chicos están expuestos al estrés
La forma en que respondemos al estrés que vivimos todos los días se presenta en nuestro organismo de una manera natural: nuestro corazón late más rápido, la presión arterial aumenta y las hormonas internas se estimulan, lo que nos alerta y nos proporciona los recursos físicos para reaccionar ante cualquier problema que se nos presente.
Esto es maravilloso, pero cuando el estrés al que estamos expuestos es por períodos cortos de tiempo. Cuando el ambiente en el que vivimos causa que el estrés sea constante o crónico, nuestro ambiente se vuela tóxico y causa cambios dramáticos en el cerebro y el cuerpo.
Los niños encima de que no saben cómo responder al estrés que sucede en sus vidas, la respuesta al estrés crónico como a los que están siendo expuestos nuestros hijos separados de sus padres en la frontera, causan consecuencias fatales en estos menores.
La presión psicológica producida por el estrés crónico también produce presión en el sistema inmunológico. Esto hace que el sistema inmunológico que no puede funcionar a toda su capacidad y proteger el cuerpo de nuestros niños, los deje más propensos a enfermarse con mucha frecuencia y severidad.
Señales de alerta
El estrés en los niños se presenta de manera diferente. Los niños más pequeños no saben cómo expresarse y muchas veces lo hacen a través de expresiones físicas, como dolor de estómago, dolor de cabeza, pérdida del apetito, problemas para dormir o estar más agresivos, aislados orinarse de nuevo en la cama etc.
Las 5 etapas psicológicas traumáticas que presentan nuestros niños cuando están expuestas al estrés son
1. Etapa de choque y negación.
2. Etapa de ira o enojo.
3. Etapa de depresión.
4. Etapa de Diálogo y Negociación.
5. Etapa de aceptación.
Cada niño experimenta dolor y pérdida de manera diferente al estar expuesto a la separación de sus familiares por un tiempo indeterminado.
Pasar por estas diferentes etapas puede causar un trastorno de estrés postraumático en estos niños y adolescentes. Este es un trastorno mental grave, a menudo crónico e incapacitante.
Debemos tener esto en cuenta para tratar a estos niños de la manera correcta y no pasar esto desapercibido una vez que se hayan reunido con sus familias.
Los pediatras debemos buscar ayuda psicológica para toda la familia y ayudarlos a acoplarse con la situación que han sufrido.
-La Dra. Denise Núñez es pediatra y fundadora de la Fundación Niño de la Caridad en El Bronx