Jomari Goyso toma revancha: Nuevo juez de ‘Nuestra Belleza Latina’
"(Hace 2 años) Me sacaron porque ellos entendían que no tenía que estar, pero en ese mismo momento me dijeron que me regresarían"
Hace 2 años Jomari Goyso estaba listo para ser presentado como juez de ‘Nuestra Belleza Latina VIP’, pero momentos antes de salir al aire le dijeron que ya no iba? Así lo relata el español en su libro ‘Desnudo’, y allí también cuenta que el mundo se le vino encima? Pero el productor ejecutivo que ese día tomó esa decisión, también le dijo que en el futuro lo volvería a llamar, cuando estuviera listo para ser parte del jurado.
Dos años después, Nelson Ruiz Productor Ejecutivo Senior de ‘Nuestra Belleza Latina’, cumplió su palabra y hoy, Jomari Goyso es oficialmente el juez del reality de los domingos de Univision, que dejó de ser un concurso de belleza, para empoderar el talento de las mujeres ‘sin tallas, sin límites y sin excusas’.
En exclusiva hablamos con Jomari, quien nos cuenta cómo se siente y cómo se prepara para este nuevo desafío tan esperado por él.
Pregunta: Hace 2 años te dejaron con las ganas y hoy tienes esa oportunidad que tanto soñaste, ¿cómo lo vives?
Jomari Goyso: Soy un tipo que confía mucho en el destino y eso me ayuda a aceptar las cosas que no puedo entender… Cuando eso pasó yo no entendía por qué. Sentía que no había hecho nada malo, que ese era mi destino, me ayudó pensar que no era mi momento… Cuando llegó esa llamada, obviamente algo se sanó dentro, literal, y me hizo entender muchas cosas. En el libro cuando cuento que me sacaron, porque ellos entendían que no tenía que estar, pero en ese mismo momento me dijeron que me regresarían, recuerdo que pensé: “Está gente está loca”… Pero sí, me llamó, el mismo productor ejecutivo fue quien me regresó.
P: ¿Por qué crees que antes no y ahora sí?
J.G.: Porque ese es el proceso de la vida, todo es un crecimiento. Nunca te puedes estancar y siempre es saber interpretar los mensajes que la vida te da, en aquel momento no estaba para aprender esto que es muy duro, porque el ego te traiciona y te vas a sentar como juez, y te sientes el superior del mundo y te lo quitan… Aprendes de esa situación en donde lo único que quieres es gritar, saltar, chillar. Hoy ya he crecido y lo veo diferente, tengo otras forma de ver las cosas.
P: Y ahora, además, eres juez de un ’Nuestra Belleza Latina’ diferente: ‘sin tallas, sin límites y sin excusas’…
J.G.: Yo creo que tuvo mucho impacto el año de Francisca Lachapel. Fue controversial porque se empezó a tocar un tema muy real que es la mentira que se ha creado alrededor de los estereotipos, eso de que es bella la mujer que tiene ciertas medidas, y no importa si hay que hacerle cirugías de arriba abajo, pero tiene que ser esa y hay que conseguirla… Con Francisca se comenzó a abrir una conversación en la que te das cuenta que la belleza no entiende de medias, ni de color, ni de nada y lo que manda es el talento. Claro que la imagen es importante, pero todos la podemos mejorar, un pelo, un maquillaje, una forma de vestir acorde…Eso sigue siendo la televisión, pero solo se quedan los que demuestran que con su talento pueden estar ahí.
P: Dentro de tus compañeros jueces ya se ha revelado que está Denise Bidot, ¿cómo te sientes compartiendo con una juez también fuera de los establecido?
J.G.: Me parece importante ser consecuente con tu idea, si yo te digo que me gustan las cosas orgánicas y me ves comiendo un pollo frito no es coherente. Lo mismo si dices que este año el reality va a ser mucho más abierto, necesitas a alguien que te valide eso, que le ponga voz. Denise trae esa realidad es una mujer exitosa, siendo que nunca ganaría el Miss Universo, pero es mucho más exitosa que muchas que han pasado por el Miss Universo. Esto le da una voz, ella puede explicar algo que yo u otra persona no puede explicar, y eso es muy importante.
P: ¿Cómo vas a ser como juez?
J.G.: Creo que he tenido la bendición o el regalo de que la gente me escucha, para bien o para mal, pero me escucha. Voy a ser el que he sido siempre detrás de cámaras, cuando he trabajado con artistas que se han bajado del escenario y me han preguntado, qué me ha gustado y qué no, qué pueden cambiar. El mundo del entretenimiento sabe que los que están alrededor de los artistas son los que más o menos les ayudan o le destrozan, y lo he visto muchas veces esto de artistas que tienen una mala compañía y se les fue todo.
La gente que te quiere ayudar y te juzga, son las que de una forma u otra controlan tu destino, entonces yo necesito ser honesto con ellas, pero intentando no hacerles daño, sabiendo que la honestidad es dura. Yo estoy aquí porque la gente de mi alrededor siempre ha sido muy honesta. Uno de los secretos es que no han tenido miedo.
Una de las cosas más difíciles en televisión es escuchar, porque todos estamos metidos en nuestras inseguridades, en nuestros miedos, de ver cómo vamos a hacer. Tu tienes que verlo, aprenderlo y eso siempre le pasa a las chicas, que le preguntas cuál es su talento y te responden otra cosa, y no porque no tengan el talento sino porque aún no se han aprendido a escuchar, y las tienes que guiar.
P: ¿Qué buscas tú de la ganadora?
J.G.: Para mí la ganadora es una persona que conecte con el público, el público es su jefe nadie más. Yo no puedo hacer que las quieran o no, pero sí a ayudarlas a conectar, porque la televisión es conexión… El público ama la realidad de una persona, no tienen que entenderla o aprobarla pero tienen que conectar, eso es muy difícil en este medio, porque hay muchos estereotipos, por eso nosotros como jueces, todos traemos algo para ayudarle a eso. Sin conexión no hay éxito.
P: ¿Qué te llamó la atención de las audiciones?
J.G.: Me sigue impactando la necesidad que tenemos de ser validados. De sentirnos bellos… Mucha chicas llegan a la audición igual sin talento, pero con eso de que le digan que son bellas y este no es tu camino. Me alegra porque ahora se que se han dado cuenta que ‘Nuestra Belleza Latina’ es una de las pocas plataformas, que quedan en la televisión, que te cambia la vida. Que entras a la tele, que te dan un contrato, que entras a trabajar y te abren una puerta… Que cambia tu vida.