La ‘Iglesia de Satán’ felicita a Christian Bale por su Globo de Oro, por su papel como Dick Cheney en “Vice”
El nuevo filme del actor saca a relucir el lado más oscuro y maquiavélico de Bale
Aunque no dejaba de ser un chascarrillo muy propio de su mordaz sentido del humor, la referencia que el actor Christian Bale hizo del mismísimo Satanás durante su discurso de aceptación en la pasada gala de los Globos de Oro, en la que se llevó el premio al mejor actor cinematográfico del género de comedia o musical por su interpretación del ex vicepresidente de Estados Unidos Dick Cheney en ‘Vice’, no ha pasado desapercibida para los fieles de la llamada ‘Iglesia de Satán’, quienes han recibido con alegría y satisfacción una mención tan honrosa y mediática al considerado ‘príncipe de las tinieblas’.
“Para nosotros, Satán es un símbolo de orgullo, de libertad e individualismo, y también ejerce como proyección metafórica y externa de nuestro potencial personal más alto. Como ha sido el talento y la excelencia del señor Bale el que le ha permitido conseguir este premio, todo ello encaja perfectamente en nuestra visión del mundo. ¡Viva Christian! ¡Viva Satán!”, reza el comunicado que ha emitido este culto a través de Twitter para felicitar al artista por su galardón.
Teniendo en cuenta que el filme por el que ha vuelto a recibir el aplauso de la crítica saca a relucir el lado más oscuro y maquiavélico del que fuera mano derecha -y para muchos el verdadero presidente en la sombra, especialmente en el diseño de la fatídica intervención militar en Irak de 2003- de George W. Bush durante sus ocho años como comandante en jefe de Estados Unidos, resulta comprensible que el actor británico, quien tuvo que ganar muchos kilos y someterse a una extraordinaria transformación física adicional para convertirse en Cheney, atribuyera de alguna forma a Satán la “inspiración” que recibió para afrontar un papel tan exigente.
“Gracias, Satán, por brindarme la inspiración que tanto necesitaba para enfocar mi personaje“, bromeaba el galés en el escenario de la gala para, a continuación, hacer todo un ejercicio de autocrítica que pone de manifiesto que, entre otras muchas cosas, sabe reírse de sí mismo y de la percepción que tienen de él ciertos sectores de la opinión pública.
“Creo que Adam (McKay, el director de la cinta) pensaba: ‘Tengo que encontrar a alguien que no tenga nada de carisma y que sea odiado por todo el mundo… Ya está, el papel debe ser para Christian Bale'”, aseguraba durante su alocución.