Una niña de tan solo 2 años diagnosticada con cáncer de ovario
Este tipo de cáncer es muy raro que se dé en niñas tan pequeñas
A una niña de solo dos años se le ha diagnosticado un cáncer de ovario increíblemente raro, después de que los médicos descubrieran una masa de tumores en su abdomen.
Se pensaba que McKenna “Kenni” Shea Xydias sufría una gran acumulación de gas en su intestino después de que su estómago se hinchara y sufriera fiebres de 40C.
Sus padres preocupados, Meagan y Mike, la llevaron a ver a un pediatra el 15 de febrero. Los doctores decidieron realizarle una resonancia magnética que reveló que la pequeña tenía tumores metastatizados, incluso tan grandes como una toronja. Las noticias les dejaron completamente devastados.
El diagnóstico fue que la pequeña padecía cáncer de ovario del saco vitelino de estadio 3, por lo que se debió someter a cirugía y quimioterapia intensiva para combatirlo.
Kenni, de la ciudad estadounidense de Senoia, Georgia, se cree que es la persona más joven en todo los Estados Unidos con este tipo de cáncer. Normalmente afecta a niñas y mujeres de entre 10 y 30 años.
Desde entonces, se ha sometido a una cirugía para extirpar la mayor parte del tumor principal y su ovario derecho.
Se sometió a su primera cirugía el 18 de febrero, lo que permitió a los médicos extirpar el 90 por ciento del tumor principal y algunos de los cánceres más pequeños.
Los cirujanos pudieron salvar un ovario, pero tuvieron que tomar algunos intestinos pequeños, según una página de GuFundMe, que hasta el momento ha recaudado $ 28,500 dólares (£ 21,500) en apoyo financiero para la familia.
Esperan que los tratamientos de quimioterapia, que comenzaron el miércoles, la ayuden a vencer la enfermedad.
Se ha lanzado una página de GoFundMe para ayudar a recaudar fondos que cubran los costes médicos. La familia tienen otros dos hermanos mayores, por lo que sus finanzas están muy ajustadas.
Los padres de Kenni se han reunido con médicos de fertilidad para hablar sobre su capacidad para tener hijos en el futuro. Mientras continúa luchando contra la enfermedad, no deja que “nada la detenga”, según informó el padre después de la última sesión de quimioterapia.