Miles de sapos venenosos infestan una ciudad del sur de Florida
Los sapos han creado una gran preocupación por la posibilidad de que sus toxinas puedan dañar a las mascotas y niños
Una plaga de miles de pequeños sapos venenosos ha invadido la ciudad de Palm Beach Gardens, en el sureste de Florida, lo que ha creado una gran preocupación por la posibilidad de que sus toxinas puedan dañar a las mascotas y niños, informaron hoy medios locales.
Las cadenas de televisión mostraron imágenes de centenares de sapos de la especie Bufo en piscinas particulares, aceras y jardines de viviendas de la citada ciudad.
“Acabo de ver una cantidad masiva de sapos o ranas por todas partes. Ni siquiera se puede caminar por la hierba sin pisar uno, ya que cubren las entradas” a las casas, dijo el propietario de una vivienda al canal CBS Miami.
“No son centenares, sino miles de pequeños sapos”, agregó.
Un experto en fumigación señaló al canal que las “lluvias recientes unidas a las cálidas temperaturas han activado el ciclo de reproducción” de estos diminutos anfibios de aspecto verrugoso que segregan una sustancia blanca, grasa y venenosa (bufotoxina) que actúa como elemento disuasorio ante los predadores.
Toad Busters, un compañía especialista en erradicación de plagas, señala en su página web que “nunca se ha conocido un caso de muerte de humanos a causa del veneno” de estos sapos.
Sin embargo, la ingesta de estos sapos o sus huevos puede ser mortal, sobre todo para perros y gatos.
No es inusual que perros y gatos “laman, orinen o muerdan a los sapos Bufo” y que estos anfibios secreten veneno de las glándulas situadas en su cabeza, advirtió la compañía.
Los animales expuestos a estas toxinas suelen presentar síntomas como convulsiones, babeo excesivo, mala coordinación de movimientos, encías muy rojas, arritmia cardíaca y vómitos.