A un mes del fin de sesiones legislativas las licencias de conducir siguen en el tintero
También está pendiente de ser aprobado en Albany un paquete de leyes sobre las rentas que darían más protección a inquilinos
A partir de este lunes queda exactamente un mes para que terminen las sesiones ordinarias en la Legislatura estatal, y todavía está pendiente que se apruebe una de las propuestas de ley más anhelada por la comunidad inmigrante, el poder tramitar las licencia de conducir, sin importar el estatus migratorio. Aunque ya cuentan con los 71 votos necesarios para que la medida pase en la Asamblea, todavía se requiere que seis senadores den el visto bueno a esta iniciativa en la Cámara Alta.
Y al iniciar la cuenta regresiva de un mes, coaliciones pro inmigrantes y organizaciones civiles se movilizarán desde este martes a Albany, para ejercer más presión y lograr la aprobación de la ‘Driver License Access and Privacy Act’ (A.10273) que beneficiaría a cerca de 265,000 personas.
Yaritza Méndez, vocera de la organización Make the Road New York, aseguró que “tienen la confirmación verbal del líder de la Asamblea, Carl Heastie, de que esta iniciativa será aprobada, pero necesitamos ejercer más presión al Senado, pues se requieren mínimo 32 votos en esta instancia”.
La coalición Luz Verde NY, que reúne a las comunidades inmigrantes, activistas y defensores en todo el estado, también dio inicio en las últimas horas a una campaña en las redes sociales para impulsar la licencia de conducir unificada, y que se centra en la divulgación de testimonios que dan cuenta de las ventajas de esta legislación.
La propuesta de ley establece que las autoridades migratorias necesitarían una orden judicial individual para acceder a la información en poder del Departamento de Vehículos Motorizados (DMV), a la vez que deja claro que los portadores de esta documentación estándar, no podrán usarla omo prueba de ciudadanía o de estatus migratorio.
Sin embargo, este beneficio, en los términos del proyecto de ley que aún se discute, ayudaría a evitar que una infracción de tráfico resulte en arresto o la deportación, ya que la personas contaría con un documento válido para conducir.
El Instituto de Políticas Fiscales (FPI) estima que de darse luz verde a esta legislación, en la Gran Manzana 150,000 personas podrán tener acceso al documento, 51,000 en Long Island y 64,000 en el norte del estado.
José Serafino Rivero es un jardinero hondureño que lleva 25 años tratando de sortear lo que significa vivir en una localidad como Fulton, en donde el transporte público es muy limitado. Como cientos de trabajadores en el estado, sigue de cerca la posibilidad de que puedan tener acceso a una licencia de conducir que les permita vivir sin miedo.
“Creo que si se aprueba esto y podamos tener licencia, sería un alivio inmenso, especialmente para la mayoría de nosotros los trabajadores que necesitamos movernos, llevar tranquilamente a nuestros hijos a las escuelas. Lo que queremos es oportunidades para vivir en paz. Se presentan emergencias con mi hija asmática y en el camino llevas doble preocupación”, expresó.
Leyes de renta también pendientes
Otras de las legislaciones que también siguen pendientes a un mes del fin de las sesiones es la que renovaría las leyes de renta estabilizada, que benefician a aproximadamente 1.2 millones de neoyorquinos y expiran el próximo 15 de junio. La Asamblea realizó durante las dos últimas semanas audiencias para discutir las propuestas y la mejor manera de proteger a los inquilinos en Nueva York.
En este momento, el organismo legislativo se encuentra analizando nueve medidas que se incluirían en el paquete de leyes sobre las rentas.
El presidente de la Asamblea Carl Heastie, y el presidente del Comité de Vivienda Steven Cymbrowitz, han reafirmado el compromiso de promulgar nuevas protecciones importantes para los arrendatarios que se darán a conocer en los próximos días.
“En el presupuesto estatal, hicimos que el límite del impuesto a la propiedad fuera permanente para brindar estabilidad a los propietarios de viviendas. Ahora debemos proporcionar ese mismo nivel de estabilidad a los inquilinos reformando nuestras leyes de alquiler y de protección a estos. Hemos visto demasiadas familias forzadas a salir de los vecindarios que crearon debido al aumento de los alquileres y por los especuladores de propiedades que están más interesados en las ganancias que en las personas”, explicó Heastie.
Existe gran expectativa en los nuevos mecanismos de protección, pues el reto de la legislatura estatal es eliminar las restricciones geográficas arbitrarias en las regulaciones de alquiler y desalojo.
“Los municipios de todo el estado de Nueva York podrían entonces optar al sistema si han declarado un estado de emergencia de vivienda, basado en una tasa de vacantes del cinco por ciento o menos. La Ley de Protección de Emergencia al Inquilino de 1974 actualmente aplica el sistema de regulación de alquiler y desalojo en la ciudad de Nueva York y los condados de Nassau, Rockland y Westchester.
Este nuevo proyecto de ley brindará una opción a los municipios de todo el estado para aprovechar este programa si fuera necesario.
