“Woody y Buzz son los Mickey y Donald de Pixar”, dice el director de Toy Story 4
Los máximos responsables de Toy Story 4 fueron becarios cuando Pixar lanzaba sus primeras películas. Nos cuentan qué significa para ellos trabajar en la saga más querida de la empresa
Toy Story es el germen de Pixar. Con el primer film se lanzó la empresa como estudio de animación y con el segundo se estableció como el indiscutible líder del sector. Cuando uno piensa en Pixar rápidamente le vienen a la mente los personajes del sheriff Woody y de Buzz Lightyear. Por eso la empresa, siempre minuciosa con sus proyectos, es aún más cuidadosa con esta saga que el próximo 21 de junio estrenará su siguiente entrega: Toy Story 4. Pudimos charlar con sus dos responsables principales: el director Josh Cooley, y el productor Jonas Rivera. Ambos comenzaron sus carreras como interns en Pixar y crecieron al lado de sus personajes.
Pregunta: ¿Cómo se siente ser parte de este legado?
Josh Cooley: Oh, es un enorme honor. Yo vi las dos primeras películas antes de trabajar aquí y me encantaron. Yo pienso en estos personajes como los Mickey, Donald y Goofy de Pixar. Es una gran responsabilidad y es muy divertido estar de vuelta con ellos.
P.: ¿Cuál fue el mayor reto?
J.C.: Problamente el hecho de que estamos continuando la historia de Woody. El final de Toy Story 3 fue el final de la historia de Woody con Andy. Luego supimos que habíamos más cosas que contar sobre Woody. Descubrir qué historia era ésa para esta película fue difícil. Pero mientras profundizábamos más, surgió ella misma.
Jonas Rivera: Estos personajes han vivido mucho. Los hemos visto en tantos escenarios y situaciones en los últimos 25 años. Uno de los retos fue encontrar algo que fuera nuevo, interesante para Woody, que le permitiera crecer pese a que sabíamos que ya había pasado por mucho y aprendido mucho. Eso fue lo más complicado.
J.C.: El statement era: “Tenemos que hacer una película que se merezca el título de Toy Story”. Ése fue el objetivo desde el día 1.
P.: Toy Story 2 se hizo en menos tiempo que el resto y sin avances tecnológicos respecto a la primera. Aún así, fue un enorme éxito y se considera la mejor de la saga. ¿Cómo se evita no dejarse deslumbrar por la tecnología y todo lo que se puede hacer hoy día en el campo de la animación?
J.R.: Toy Story 2 es un recordatorio de que, pese a que estamos orgullosos de nuestros avances, nada de esto tiene que ver con tecnología. Nos gusta decir que si hiciéramos las películas con muñecos de trapo, seguirían siendo buenas, por el nivel de la historia. Son historias sobre relaciones y personajes. La tecnología te permite hacer cosas que normalmente no podías hacer y celebras la animación, la destreza, la lluvia, las imágenes… pero al final del día son historias. Lo más difícil es tener la historia. Una vez que la tienes y hace sentido, el equipo y la tecnología pueden lograr cualquier cosa. Confías en la tecnología para que todo salga bien, pero no confías en la tecnología para que sea lo que asombre a todo el mundo.
P.: En las primeras imágenes filtradas de la película no se ve mucho a Buzz Lightyear…
J.R.: Hay mucho tiempo de pantalla de Woody y Buzz juntos, pero no lo hemos mostrado aún. La relación entre ellos es tan importante que la desarrollamos y profundizamos en ella. Hay muchos personajes en esta película y es fácil perderse, pero la relación entre Woody y Buzz siempre fue una de las centrales en el film.
P.: Forky es el nuevo personaje. ¿Cómo de importante es para el film?
J.C.: Un día estábamos dándole vueltas a la historia y comenzamos a pensar: “¿Qué pasa si un niño empieza a jugar con cualquier cosa?, ¿lo convierte en un juguete? Fue una idea divertida, ¿qué pasa si le ponemos ojos a un tenedor y le damos vida? Tener un personaje como ése, que no ha conocido Toy Story 1, 2, ó 3, que no sabe las reglas del mundo, que no entiende qué significa ser un juguete… se volvió esencial para que Woody tuviera que explicar el mundo así mismo y a este personaje inocente. Y haciendo eso aprendió más sobre sí mismo. Forky es muy divertido, nos encantó animarlo y su existencia se convirtió en algo muy importante en el film.
J.R.: Tony Hale [voz de Forky] aportó mucho al personaje. Cuando le llamamos para el casting le dijimos que era un personaje que se está haciendo la pregunta ¿por qué estoy vivo? Y contestó: ‘Sí, eso es algo con lo que puedo jugar’. Y realmente le hincó los dientes.
P.: Es fantástico que uno mismo lo puede hacer en casa.
J.C.: ¡Sí! Nuestros hijos los hacían todo el rato.
P.: Aunque no sé si es bueno para el merchandising…
J.C.: ¡Quizá no!
J.R.: ¿Sabes qué? Si los niños se ponen a hacer sus propios juguetes después de ver la película, yo estaría entusiasmado.
P.: Tenemos el Universo Marvel, el Universo de DC, de Star Wars… ¿hay espacio para un Universo Pixar en el que se mezclen historias y personajes?
J.C.: Nunca hemos ido en esa dirección…
J.R.: Creo que a mí me echaría para atrás, me sacaría de la historia.
J.C.: Muchos de estos films son historias muy personales de nuestros directores. Son historias que ellos proponen porque realmente creen en ellas y están conectadas personalmente a ellas. Acaban teniendo algo especial y único que las hace destacar por sí solas. Al ser ése el origen de muchos de nuestros films cuando se están desarrollando, no evolucionan hacia la posibilidad de mezclarse con otras historias. Normalmente se busca contar una historia nueva que nunca hemos contado antes.
J.R.: Puede funcionar en algunos productos, como los parques de atracciones o en videojuegos. Pero cada película es su película y cada historia, su historia.
P.: ¿Habrá Toy Story 5?
J.R.: No hemos pensando en nada aún.
J.C.: Queremos que veas antes Toy Story 4.