Las fotos en bikini de Britney Spears que la hicieron enfurecer: ¿su peor ángulo?
Acusó a los paparazzi de editar las imágenes
Desde que se hiciera público que Britney Spears había abandonado la clínica de salud mental en que permaneció ingresada varias semanas para lidiar con el estrés que le ha generado la grave enfermedad de su padre, el aspecto físico de la artista ha sido analizado hasta el más mínimo detalle en cada una de su apariciones públicas en busca de alguna pista que pudiera sugerir que está a punto de sufrir una crisis nerviosa similar a la que vivió hace ya una década.
Este domingo la princesa del pop fue fotografiada con su novio Sam Asghari en las playas de Miami y no le ha hecho ninguna gracia descubrir lo poco favorecida que, en su opinión, aparece en dichas imágenes.
En respuesta, la artista ha recurrido a su perfil de Instagram para compartir un vídeo en el que responde a todos los fans que la acusan de compartir en sus redes sociales imágenes antiguas o directamente retocadas al compararlas sus publicaciones con las fotografías suyas que ven con frecuencia en los medios, como las de este mismo fin de semana.
“Hola. Por favor, no me juzguen tengo un aspecto terrible”, arranca el vídeo en el que tiene la máscara de pestañas corrida y el pelo revuelto después de practicar esquí acuático.
“Nadie se pregunta nunca si las fotos de los paparazzi son falsas o si las han alterado de alguna manera y si, en consecuencias, las noticias son verdaderamente ‘reales’. Es una teoría conspiratoria que a mí me interesa bastante. Ayer fui a nadar. Y en las fotos que me sacaron parece que peso 18 kilos más que hoy. Así estoy ahora mismo, más delgada que un palo”.
https://www.instagram.com/p/ByiyzbyAyn_/
Como prueba, Britney ha posado en bikini ante la cámara de su teléfono móvil para mostrar su silueta actual antes de lanzar una pregunta como despedida: “Decidme vosotros, ¿qué creéis que es real?”.