Ricky Martin en pie de guerra contra ley de libertad religiosa
Encaró al gobernador de Puerto Rico
El cantante Ricky Martin se expresó esta tarde en contra del proyecto de ley de la Cámara de Representantes sobre la libertad religiosa aduciendo que da un paso atrás en la búsqueda de la equidad, el respeto a la diversidad y a los derechos humanos en general.
En su declaración, el artista y filántropo puertorriqueño hace un llamado al gobernador Ricardo Rosselló y al Senado de Puerto Rico para que no den paso a la medida aprobada ayer en la Cámara de Representantes, la cual permite entre sus disposiciones el “acomodo razonable” para que un empleado de una agencia pública pueda negarse a dar un servicio a cualquier ciudadano si considera que va en contra de sus creencias religiosas.
A continuación la declaración del artista, según publicada en sus redes sociales:
“Mientras el mundo llama a la equidad, al respeto a la diversidad y a la defensa de los derechos humanos, la Cámara de Representantes y el Gobernador de Puerto Rico impulsan una medida que revierte todo lo anterior para consentir la separación, el prejuicio, el odio y la falta de respeto a la individualidad. Lo hace bajo una premisa que tergiversa el derecho constitucional a no discriminar por raza, sexo o creencia, y en su lugar, justificar una protección irracional a las convicciones religiosas de los empleados del Gobierno.
De hecho, como miembro de la comunidad LGBTT me uno al coro de voces que afirman que nunca ha habido un consenso entre nuestra gente LGBTT para validar o legalizar el discrimen en contra nuestra.
El Proyecto de la Cámara 2069, radicado por petición del Gobernador Ricardo Rosselló e impulsado por la representante Charbonier, no es otra cosa que abrirle la puerta al odio hacia todo aquel o aquella que no comparta una misma ideología, que pertenezca a la comunidad LGBTT, o que incluso no sea del mismo color de piel, entre tantas otras manifestaciones discriminatorias.
La libertad religiosa implica respetar al otro de la misma manera que respetamos a los demás.
Como defensor de los derechos humanos y miembro de la comunidad LGBTT, me opongo vehementemente al proyecto de libertad religiosa, el cual nos atrasa como sociedad y nos proyecta ante el mundo como un país retrógrado, e incapaz de guardar el derecho básico a la individualidad.
Este proyecto no es representativo del Puerto Rico que todos amamos, defendemos y al que aspiramos.
Hacemos un llamado al Senado y al Gobernador Ricardo Rosselló para que no aprueben este proyecto que es una puerta abierta al odio y al discrimen”.