Extorsionadores esclavizan a miles de mexicanos
Sus blancos son comerciantes, ganaderos, empresas de todo tipo, profesionistas y familias con hijos desaparecidos
MEXICO.- Los extorsionadores están dispuestos a matar para tener una renta ilegal, tal y como quedó demostrado en los últimos días que asesinaron a tres mujeres tortilleras por protestar frente al ayuntamiento de Celaya, Guanajuato.
El delito ha escalado a tal grado que ha alcanzado niveles sin precedentes hasta convertir a miles de mexicanos prácticamente en “esclavos”. En el estado de Guerrero, por ejemplo, los taxistas deben pagar cuotas a los delincuentes para no ser asesinados y están amenazados con la consigna de que si dejan de trabajar el vehículo o lo venden, irán contra las familias: sus esposas, padres, hijos…
“Estamos trabajando para ellos sin poder escapar: somos sus esclavos”, dijo José N.,quien pidió el anonimato por razones de seguridad.
En los últimos tres años, la extorsión creció hasta el 200% y ninguna región se salva; en algunas los pobladores viven prácticamente un estatus de rehén, según las denuncias vertidas por el secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública y encuestas del Instituto Nacional de Estadística Geografía.
En Zacatecas (el caso a nivel nacional más preocupante por la alza de casi el 50%), el número de casos anuales se cifró en 174,176 (500 casos diarios); Guerrero, subió 36% por ciento, con 1,070 casos en promedio al día; Tamaulipas, 35%, con 575 casos al día; Nayarit, 34%, con 274 y San Luis Potosí, 32%, con 535.
El blanco son, desde comerciantes,ganaderos, empresas de todo tipo, profesionistas y hasta familias con hijos desaparecidos como en Jalisco. Guadalupe Aguilar, presidenta de la organización Familias Unidas por Nuestros Desaparecidos Jalisco alertó que el 90% de personas que ha hecho público su número telefónico personal para recibir informes de sus seres queridos.
Las razones por las cuales ha aumentado, según las autoridades, son porque algunas células se mudaron desde el narcotráfico o el robo de combustible para diversificar sus actividades o cuando estos delitos comenzaron a atacarse de manera puntual. Otros, más críticos, insisten en que se trata de un delito fácil porque casi no se denuncia ni se ataca.
“¿Cómo quiere el gobierno que se denuncien si cuando se hace las consecuencias son las que vimos en Celaya con las tortilleras?”, observó el extitular del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, Juan Miguel Alcántara. “El problema es que se invita a denunciar cuando no se tiene las capacidades humanas y tecnológicas para proteger a las víctimas”.
El tema de la extorsión tiene muchos años de denuncias, pero la falta de atención y la impunidad han formado a criminales cínicos muy confiados en el poder de la intimidación. En el estado de Morelos, una filmación que circuló en redes dio cuenta de cómo Santiago Mazari, “El Carrete”, líder de Los Rojos, operaba para extorsionar.
En una comilona a la que invitó por igual a carniceros, huaracheros, ganaderos, agricultores y autoridades, les pidió cuotas de todo tipo en el mismo evento: de dinero en efectivo a puestos públicos en el caso de los presidentes municipales. “Incluso piden ser partícipes de obra pública, 10%, 15%”, dijo un funcionario entrevistado por este diario.
La falta de control en las extorsiones empujó a ciudadanos de Michoacán a formar grupos de autodefensa durante la administración de Enrique Peña Nieto cuando la delincuencia les cobraba cuotas hasta por tener a hijos en la escuela, pero aún no descartan volver a levantarse en caso de ser necesario como ya se ha visto en algunos municipios, dijo Hipólito Mora, líder del movimiento en La Ruana.
“Esto no se ha arreglado porque es un tema de justicia que está podrido, que no sirve y ningún gobierno quiere entrarle o simplemente no puede”.