Viuda de José José dice que no tiene nada que celebrar en San Valentín
Sara Salazar explica cómo se enfrenta a la soledad en días especiales como el de ayer
“No tengo nada que celebrar, Me siento triste porque el Día de San Valentín lo pasábamos juntos y ya no está”, así aseguró sentirse la viuda de José José, Sara Salazar, al recordar a su desaparecido esposo y sus detalles de amor en tan especial ocasión.
Salazar encendió una vela blanca por el eterno descanso del Príncipe de la Canción y confeccionó un corazón de papel, el cual colocó junto a una rosa en una de sus fotos que engalana la sala de la residencia de su hija Sarita Sosa en Miami, Florida.
La viuda de José José, quien falleció el pasado 28 de septiembre víctima de cáncer de páncreas, contó cómo ha logrado sobreponerse a su partida.
“Es un proceso muy fuerte, extraño mucho a mi esposo. Cada vez que veo su ropa o zapatos me echo a llorar. Para poder contrarrestar la tristeza trato de recordar los momentos felices que vivimos juntos. Como ahora es un ángel de luz, que nos cuida desde el cielo, yo le pido que me dé fuerzas para poder ayudar a mi hijas y a mi nieta, Belencita”, manifestó.
El pasado mes de noviembre se cumplieron 11 años de haber sobrevivido a la aneurisma que la mantuvo en coma inducida tres meses.
“Ese día volví a nacer, porque los médicos me daban solo un 10% de posibilidades de vida, pero Dios me levantó. Fue un milagro. Gracias a El puedo caminar y soy una mujer funcional”, sostuvo.
Salazar desea compartir su experiencia vivida y servir de ejemplo a otras personas. “Me gustaria ofrecer charlas motivacionales y contar mi experiencia para que las personas que estén deprimidas por alguna condición de salud no se desanimen y desarrollen su autoestima, porque querer es poder”, subrayó.
Sobre los ataques que han recibido ella y su hija Sarita por parte de la famila mexicana de José José, a pesar de haberse cumplido cuatro meses de su muerte, dijo que, “yo no le doy cabida a nada negativo en mi vida, no permito que nadie perturbe la paz que tengo, ni la de mis hijas. Por cada calumnia envío bendiciones”.