¿Cómo podemos ayudar a amigos que hayan contraído VIH?
El VIH es una enfermedad de transmisión sexual que aún no tiene cura
Si uno de tus amigos tiene VIH, no debes estigmatizarlo ni mucho menos alejarte de él. Para tratar este tema, primero debes informarte y saber todo lo posible sobre esta enfermedad. Es por eso que aquí te damos información que puede ser de ayuda a la hora de brindarles tu apoyo.
Apoyarlos
Según la organización Kids Health, las personas con VIH son estigmatizadas, y es común que las personas que los rodean se alejen o cambien de actitud con ellos, creando rechazos.
Para evitar esto, debes compartir con ellos. Al principio puede causarte cierta incomodidad, pero recordar que la enfermedad no se transmite a través de abrazos o de contacto físico, es importante para que vayas venciendo el estigma.
Sé una persona confiable
Si tienes amigos con VIH, no lo divulgues. Esto les creará más problemas, y también causará que pierdas su confianza. Además, en vez de ayudar, propagarías aún más el estigma. Ten en cuenta que revelar su enfermedad es una decisión que ellos deben tomar.
Por otro lado, si tu amigo lo desea, puedes hablar sobre el tema. Deja que se exprese sobre cómo es vivir con la enfermedad. Escucha y hazle saber el aprecio que le tienes y que lo apoyas. Pero si no quiere hablar, no tienes que forzar la conversación.
Actividades en conjunto
La enfermedad puede afectar su estado de ánimo. Por eso puedes invitarlo a ir a algún lugar interesante o a realizar una actividad divertida. El bosque, la playa, un parque… estos son sitios que contribuyen a reducir el estrés emocional. Puedes convertirte en un punto de apoyo en cuanto a mantener una rutina saludable.
En este sentido, puedes llegar a ser una influencia positiva. Fomenta hábitos saludables, como hacer ejercicio, estudiar, practicar algún deporte… y evita prácticas que pudieran perjudicar su estado de salud, como fumar, ingerir bebidas alcohólicas o sustancias estupefacientes.
Aunque todavía no existe una cura contra el VIH, en muchos países el tratamiento que siguen los pacientes que lo padecen les ayuda a mantener un ritmo de vida normal, lo que les permite sobrellevar las dificultades y permanecer con una mentalidad positiva.