Corte da luz verde a que se hagan públicos archivos disciplinarios de la policía
La decisión es una victoria de los defensores de los derechos civiles que exigen se mantenga la legislación que derogó la Ley 50-A que permitía el secreto policial.
NUEVA YORK.- La Corte Federal de Apelaciones del Segundo Circuito falló este jueves en contra de la demanda planteada por la Asociación de Oficiales de Bomberos Uniformados y de varios sindicatos de policías que buscaba restringir que la Unión de Libertades Civiles de Nueva York (NYCLU) publique los archivos de la Junta de Revisión de Quejas Civiles (CCRB) obtenidos a través de la Ley de Libertad de Información (FOIL).
“Con estos datos que ahora son públicos, los neoyorquinos estarán en mejores condiciones de responsabilizar a los agentes del Departamento de Policía de Nueva York que cometan actos de mala conducta y traicionan la confianza del público”, dijo Corey Stoughton, abogado a cargo de la Unidad de Litigios Especiales de Legal Aid Society.
La demanda colectiva presentada el 14 de julio por la Police Benevolent Association, la Correction Officer Benevolent Association y la Uniformed Firefighters Association of Greater New York, surgió a raíz de que el 12 de junio, el gobernador Andrew Cuomo promulgara la legislación que derogó por completo la Ley 50-A de Secreto Policial.
La Ley 50-A estuvo en vigencia desde 1976, y permitió que no se hagan públicos los archivos disciplinarios, investigaciones y acciones tomadas sobre la mala conducta de los agentes del orden. Esta legislación amparaba también a bomberos y oficiales de las cárceles para mantener en secreto sus archivos a menos que un juez ordenara lo contrario, pese a la existencia de la Ley FOIL.
Según Stoughton, a partir de esta decisión, los abogados podrán utilizar esta información para exponer las irregularidades del NYPD y poder defender mejor a los clientes en los tribunales. Además, estos datos también allanarán el camino para más innovaciones necesarias para reformar un Departamento que realmente responda a las necesidades de las comunidades.
“La luz del sol es el mejor desinfectante, y la cultura de impunidad disfrutada durante décadas en los cuarteles de la ciudad de Nueva York, a expensas de nuestros clientes, en su mayoría neoyorquinos negros y latinos, está comenzando a cambiar lentamente”, agregó Stoughton.
La derogación de la Ley 50-A de Secreto Policial se logró después que miles de neoyorquinos marcharon, protestaron y se organizaron en todo el estado de Nueva York exigiendo la transparencia policial, la rendición de cuentas.
De acuerdo con Communities United for Police Reform (CPR), la Ley 50-A de Secreto Policial, fue utilizada por el NYPD para ocultar la mala conducta policial en sus interacciones con el público.
Qué dicen los sindicatos
“Esta demanda defiende los derechos básicos de las personas a la privacidad y la igualdad de protección, y la presunción de inocencia a menos que se demuestre lo contrario después de un procedimiento legal”, dijo Hank Sheinkopf, portavoz de We Are All New York (la coalición formada por los cinco sindicatos de policías, la Correction Officers’ Benevolent Association, la Uniformed Firefighters Association of Greater New York, y la Uniformed Fire Officers Association).
“Una base de datos, que contiene documentos que describen acusaciones no probadas y sin juicio contra empleados de seguridad pública, valientes e inocentes, que diligentemente van a trabajar todos los días y se ponen en peligro para proteger a los 8,5 millones de residentes y 60 millones de visitantes de la ciudad de Nueva York cada año, no es lo justo en cualquier medida. Dejaría a estos servidores públicos esenciales con menos derechos y protecciones que otros empleados de la ciudad”, insistió a través de un comunicado Sheinkopf.