Los costos ocultos de comprar una vivienda en Estados Unidos: por qué muchos prefieren rentar
Ser dueño de una casa es motivo de gran satisfacción personal, sin embargo, el orgullo de ser propietario de un bien inmueble conlleva gastos que no todo mundo está dispuesto a enfrentar, por lo que rentar puede ser mejor opción para algunas personas
Ser propietario de una vivienda implica una serie de gastos que no siempre tomamos en cuenta al momento de adquirirla. Crédito: Ketut Subiyanto | Pexels
Seguramente el deseo de muchas personas es tener una casa, un lugar propio para ya no tener que pagar más rentas en la vida. No obstante, ser propietario requiere estar consciente de los gastos que hay que atender, por lo que es importante reflexionar muy bien qué es más conveniente para nosotros: comprar o rentar.
Jen Glantz, en una colaboración para Insider, compartió su experiencia y la de un grupo de amigos con propiedades. Ella renta y considera que su mejor opción es continuar alquilando su vivienda, pues de esa manera evitará gastos que no está dispuesta a asumir.
Jen se reunió con amistades que cuentan con vivienda propia y descubrió 5 costos ocultos de ser propietario, mismos que la convencieron de alquilar vivienda para siempre.
1. Gastos por asociación de propietarios
Los amigos de Jen viven en vecindarios con asociaciones de propietarios, que son juntas directivas que intervienen para mantener la propiedad y hacer cumplir las reglas del vecindario, con actividades que van desde la organización de eventos hasta pintar las casas de determinados colores.
También administran un presupuesto que consta de cuotas para garantizar el mantenimiento, seguridad y algunos servicios y si es necesario pueden convocar a gastos adicionales para el beneficio de la comunidad. En ese caso, es posible terminar pagando más de los pagos mensuales o trimestrales habituales.
2. Impuestos por impuestos a la propiedad
Ser dueño de una casa implica el pago de impuestos sobre el bien inmueble. Generalmente el propietario sabe cuánto debe pagar mensualmente. Sin embargo, los impuestos por este concepto pueden seguir aumentando y pueden llegar a significar unos cientos de dólares al mes en gastos adicionales de los que se estaba dispuesto a pagar inicialmente.
3. Gastos por reparaciones
Es inevitable que los dueños de propiedades asuman grandes facturas cuando el aire acondicionado, lavadoras, lavavajillas y otros aparatos dejan de funcionar durante los primeros años de ser propietarios de una casa antigua. Lo mismo es cuando se requieren reparaciones importantes en techo y paredes.
4. Seguros y vigilancia
Los dueños de una casa quieren protegerla de todas las formas posibles. Muchos contratan un seguro y buscan una capa adicional de protección, lo que puede significar miles de dólares al año en sistemas de alarma y cámaras adicionales.
5. Gastos de mantenimiento
Los amigos de Jen que son dueños de casas se sienten orgullosos de sus propiedades y pagan para mantener y vivir en un lugar que es verdaderamente suyo. Sin embargo, desembolsan mucho dinero y frecuentemente para mantener la apariencia de sus hogares. Las facturas van desde servicios de cuidado del césped hasta pintar el exterior de la casa, jardinería y limpieza de piscinas, por lo que llegan a destinar más de $10,000 dólares al año.
Finalmente, Jen Glantz decidió que para ella alquilar es lo más conveniente, no tiene que pagar porque el exterior de su vivienda se vea bien, no se preocupa, evita el estrés y se ahorra mucho dinero para destinarlo en otros intereses.
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