Trabajadores agrícolas de NY exigen al Estado aprobar de inmediato el pago de horas extra estándar
Piden implementar ya la recomendación de la Junta de Salarios del Departamento de Trabajo del Estado de mover el umbral de horas extras de 60 horas a 40 horas, pues por años los trabajadores del campo, mayormente inmigrantes, han sido tratados con discriminación, exclusión e injusticia
Las leyes laborales del estado de Nueva York advierten que la jornada de trabajo regular en la mayoría de las industrias es de 40 horas, y quien trabaje más de ese límite, debe devengar un pago adicional superior, por concepto de tiempo extra.
Pero este precepto no aplica para los empleados de la industria agrícola (mayormente inmigrantes), quienes en un hecho que muchos califican como una clara muestra de injusticia racial y económica, por ley, solo están amparados para recibir pagos extra después de 60 horas laborales.
Así lo confiesa Leticia, una madre de familia quien lleva años trabajando en labores del campo en Nueva York, y quien este miércoles se sumó al llamado para que el Departamento de Trabajo ponga de una vez por todas fin a la exclusión y al trato de segunda clase que reciben empleados del agro, y los meta en el mismo saco del resto de trabajadores, pagándoles tiempo extra después de jornadas de 40 horas. Esa fue la recomendación que hizo en enero pasado la Junta de Salarios del Departamento de Trabajo del Estado para mover el umbral de horas extra de 60 horas a 40 horas, y que el martes fue transmitida oficialmente a la comisionada del Departamento de Trabajo (DOL), Roberta Reardon, que tiene ahora 45 días para aceptar, rechazar o modificar lo propuesto y pronunciarse a más tardar en octubre próximo.
“Yo tengo que trabajar todos los días y a la semana trabajo de 60 a 70 y hasta 80 horas, algo que nos afecta la salud y el desarrollo de nuestros hijos. Trabajando así, no podemos estar en vacaciones, eventos de las escuelas, visitas médicas no nos deja tiempo para ayudarlos en las tareas ni convivir con ellos, y todavía así, no ganamos horas extra”, narró la trabajadora agrícola.
“Nosotros queremos ganar horas extra. Así mi vida cambiaría en todos los aspectos y no me sentiría tan explotada en el lugar de trabajo; queremos ser escuchados y no excluidos“, agregó la empleada sel sector agro. “Por eso estamos pidiendo a la gobernadora y al Departamento de labor que nos reconozca que el pago de horas extra sea después de 40 horas y que se haga por ley. No nos menosprecien. Es duro el trabajo que hacemos y no merecemos más exclusión. Queremos igualdad“.
Desde el 2019, cuando la Legislatura aprobó la Ley de prácticas laborales justas para trabajadores agrícolas, que mejoró muchos aspectos del plano laboral para estos empleados, fijó el pago de horas extra tras 60 horas a la semana, y aunque pidió al Departamento de Trabajo convocar una junta de salarios para decidir si se debía reducir ese umbral, esa agencia no ha implementado cambios todavía, que incluso respalda la Gobernadora Hochul.
De aprobarse la recomendación de la Junta de Salarios de Trabajadores Agrícolas, las cosas comenzarían a cambiar gradualmente hasta llegar a un umbral de horas extra de 40 horas para los trabajadores agrícolas durante diez años a partir de enero de 2024. Con esta propuesta las cosas empezarían a cambiar para los trabajadores en dos años, cuando el umbral de horas extra experimentaría su primera reducción, con pagos extra después de 56 horas. Luego el umbral seguiríá bajando 4 horas cada dos años, hasta llegar a 40 horas en 2032.
Líderes de organizaciones defensoras de los trabajadores se sumaron al llamado, y exigieron que para mejorar las condiciones laborales justas de los entre 30,000 y 70,000 trabajadores que se estima hay en el agro en Nueva York y se ponga fin a la explotación, de ahora en adelante se le concedan los mismos derechos que a cualquier otro trabajador sobre las horas extra.
“Pagar horas extras a los trabajadores agrícolas no es solo lo correcto. También impulsará la economía agrícola de Nueva York hacia la modernización. Cuando los propietarios de granjas tienen que pagar horas extras, los empuja a ser mejores administradores”, dijo David Dyssegaard Kallick, director de la Iniciativa de Investigación de Inmigración. “Hay un costo para los propietarios de granjas, sin duda, pero no es un costo de dólar por dólar y, a la larga, hará que la economía agrícola del estado de Nueva York sea más resistente y competitiva”.
Jessica Maxwell, directora ejecutiva del Workers Center of Central New York, se mostró optimista sobre un pronto cambio, ya que la Junta de Salarios ha reconocido la injusticia que se está cometiendo con estos trabajadores y emitió unas recomendaciones para que se introduzca gradualmente un umbral de 40 horas para el pago de horas extra para los trabajadores agrícolas.
“Estamos entusiasmados de que el estado de Nueva York finalmente se esté poniendo al día con California, Washington y Oregón para convertirse en el cuarto estado que cambiará a una semana laboral de 40 horas para los trabajadores agrícolas“, dijo la activista, en momentos en que el balón está en manos de las autoridades estatales que rigen los asuntos de trabajo. “Instamos al Departamento de Labor y a la Gobernadora a que aceleren la implementación, dado el proceso de deliberación y audiencia de varios años y el extenso cronograma de incorporación”.
Lisa Zucker, abogada de asuntos legislativos de la Unión de Libertades Civiles de Nueva York, aseguró que es hora de actuar rápidamente para corregir las injusticias y la exclusión con que se ha tratado a los trabajadores del campo.
“Los trabajadores agrícolas han esperado más de 80 años para que se termine la exclusión racista que les ha robado incontables horas de pago de horas extras. La gobernadora Hochul y el comisionado Reardon deben evitar que otra generación de trabajadores sufra al aceptar inequívocamente la recomendación de la Junta de Salarios”, dijo la defensora. “Con el crédito fiscal reembolsable de más de dólar por dólar de la Gobernadora Hochul, no hay razón para que el límite de horas extra no pueda reducirse inmediatamente a 40 horas, erradicando esta política racista de Jim Crow de una vez por todas”.
Murad Awawdeh, director ejecutivo de la Coalición de Inmigración de Nueva York (NYIC) resaltó que los trabajadores agrícolas inmigrantes son quienes alimentan al estado pues sin su labor la industria agrícola y el suministro de alimentos no podrían existir.
“Sin embargo, están inexcusablemente excluidos del derecho a recibir una compensación justa por el pago de horas extra después de 40 horas de trabajo, un remanente del legado racista de Jim Crow de excluir a los trabajadores agrícolas de los derechos laborales”, dijo el defensor de la comunidad inmigrante.
“Durante demasiado tiempo, los trabajadores agrícolas se han visto obligados a soportar la carga de un sistema sesgado y se les ha pagado menos por su trabajo de horas extras que al resto de la fuerza laboral en el estado. Es hora de que el DOL actúe rápidamente para implementar esta recomendación y tratar a los trabajadores agrícolas de manera justa y con la dignidad y el respeto que merecen”, agregó Awawdeh.
Stuart Appelbaum, presidente del Sindicato de Tiendas Minoristas, Mayoristas y Departamentales (RWDSU) reconoció que en 2019, el Estado dio un paso audaz cuando promulgó la Ley de prácticas laborales justas para trabajadores agrícolas, pero critió que se haya quedado atrás en cuestiones de justicia laboral, al no otorgar a los trabajadores agrícolas una semana laboral de 40 horas con pago de horas extras.
“Los trabajadores agrícolas merecen la misma dignidad y respeto en el trabajo que otros trabajadores en el estado, la mayoría de los cuales ya tienen derecho a la semana laboral de 40 horas”, dijo el líder sindical. “Hagámoslo bien y brindemos justicia plena a los trabajadores agrícolas. El Departamento de Trabajo tiene la oportunidad de otorgarles a los trabajadores agrícolas igualdad de derechos y protecciones, por lo que instamos a la rápida adopción de este plan para corregir los errores de la historia”.
Tras la exigencia de los trabajadores y las organizaciones defensoras de los empelados agrícolas, el Departamento de Trabajo del Estado de Nueva York (DOL) manifestó que las recomendaciones están siendo analizadas.
“La comisionada Reardon recibió el informe oficial de la Junta de Salarios de Trabajadores Agrícolas y actualmente se encuentra bajo revisión. La decisión de la Comisionada se anunciará en las próximas semanas”.
De adoptarse las recomendaciones, esto permitirá que el Departamento se someta a un proceso de elaboración de reglas, durante el cual habrá un período de comentarios públicos de 60 días.
Datos del pago de horas extras para trabajadores agrícolas en NY
- 60 horas es la jornada laboral actual necesaria para empezar a devengar horas extras
- 40 horas es la jornada de la mayoría de trabajadores en NY para empezar a pedir pagos extra
- $39,137 es el salario promedio de un trabajador agrícola en NY
- 2,297 empresas del agro existen en NY
- 2019 la Legislatura aprobó la Ley de prácticas laborales justas para trabajadores agrícolas, pero fijó el pago de horas extra tras 60 horas a la semana
- 18 meses dio al Departamento de Trabajo para analizar si reducía ese umbral
- En enero pasado la Junta de Salarios de Trabajadores Agrícolas votó para introducir gradualmente un umbral de horas extra de 40 horas para los trabajadores agrícolas durante diez años
- 2024 sería el primer año de reducción del umbral de horas para aplicar por extras
- 56 horas sería requerido en 2024 para empezar a solicitar pagos extra
- 4 horas seguiría disminuyéndose el umbral cada dos años
- 2032 sería el año en que los trabajadores agrícolas lograrían ser equiparados con la jornada regular de 40 horas para pedir pagos extra
- 6 de septiembre del 2022 recibió la propuesta la comisionada de Trabajo
- 45 días tiene ahora el Departamento de Labor para referirse a esta propuesta
- 60 días después de ello, en caso de aprobarse, habría un proceso de elaboración de reglas, durante el cual habrá un período de comentarios públicos.