Madre latina quiere cambiar su nombre a “Jesucristo Lucifer Obama”: juez de Nueva York se lo prohibió
Nancy Evelina Torres Amos, madre de cinco hijos en Staten Island (NYC), quiso cambiar su nombre a "JesusChrist Evilina Lucifer-Obama", pero un juez se lo impidió porque causaría “alarma pública y estrés indebido”
Nancy Evelina Torres Amos, madre de cinco hijos en Nueva York, quiso cambiar su nombre a “Imperial Highness Archduchess Goddess JesusChrist Evilina Lucifer-Obama” (Alteza Imperial Archiduquesa Diosa Jesucristo Evilina Lucifer-Obama), pero un juez se lo impidió.
Torres Amos, de 43 años, primero acudió al Tribunal Civil del condado Richmond de Staten Island el mes pasado en busca del nuevo nombre, pero el personal del tribunal le pidió que acortara la solicitud de ocho palabras porque era demasiado larga.
“Me dijeron que lo arreglara y lo acortara”, dijo al New York Post. Por ello la madre hispana simplificó su solicitud a “JesusChrist Evilina Lucifer-Obama”, citando “preferencia personal” en el papeleo de la corte como su razón para querer un nuevo nombre.
Pero en esa segunda oportunidad el juez civil Matthew Blum rechazó la solicitud de cambio de nombre alegando que causaría “alarma pública y estrés indebido”, informó el portal Law.com.
“Al asumir el nombre de ‘Jesucristo’, ¿se espera que alguien te alabe? Por otro lado, al asumir el nombre de ‘Lucifer’, ¿se espera que uno lo evite o lo rechace? ¿Estás afirmando ser Hija de Dios o Príncipe de las Tinieblas? ¿Estás obligando a un no creyente en cualquiera de estas entidades a aceptar la existencia de estas entidades?, el juez Blum reflexionó en los documentos judiciales.
“Permitir este cambio de nombre colocaría a miembros involuntarios del público en la posición de tener que proclamar las creencias religiosas [de Torres Amos], que pueden o no estar de acuerdo con las propias creencias de esa persona”, prosiguió el juez en su veredicto.
Torres Amos, quien dijo que creció en orfanatos y que sus hijos están actualmente en hogares de guarda, no está enojada porque su pedido haya sido rechazado dos veces. “Fue suficiente para que entendieran que yo sé quién soy”, afirmó impetuosa.