Exigen a Albany aprobar protecciones para inquilinos, seguro de desempleo y aumento a salarios para frenar éxodo masivo en NY
En medio de una manifestación en el Capitolio estatal, urgieron a la Gobernadora Hochul y a la Legislatura dar luz verde a proyectos como "Buena Causa" y vales de vivienda, que garanticen seguridad de albergue, seguro de desempleo para todos, sin importar estatus migratorio, y un salario mínimo digno
Este miércoles se realizó una audiencia en el seno de la Legislatura estatal en Albany para discutir la creciente crisis de seguridad de vivienda que tanto afecta a comunidades vulnerables de Nueva York como negros y latinos. Y en su afán de que sus clamores sean escuchados, cientos de inmigrantes, desamparados, exreclusos y trabajadores, viajaron hasta la sede del Capitolio, para exigir que en medio del impacto que ha dejado el aumento en el costo de vida, la Gobernadora Kathy Hochul, al igual que el Senado y la Asamblea, incluyan dentro del presupuesto para el nuevo año fiscal protecciones para los inquilinos, apoyo por desempleo para los trabajadores excluidos y un salario mínimo digno.
Con pancartas y arengas, los manifestantes criticaron a la mandataria estatal por haber dejado por fuera de sus prioridades a los más vulnerables y advirtieron que de no incluirse iniciativas que le tiendan la mano a los más necesitados, como las familias indocumentadas, se acelerará la creciente migración de neoyorquinos de bajos recursos hacia otros estados.
“Pagar el alquiler y poner comida en la mesa“, esos son los principales clamores que los manifestantes exigieron a los líderes políticos neoyorquinos para la clase trabajadora, por lo que insistieron en que se dé luz verde a iniciativas para ayudar a los inquilinos a luchar contra los fuertes aumentos de los alquileres y los desalojos, el apoyo por desempleo y mejores sueldos que luchen contra la pobreza del estado.
Una de las grandes quejas hacia Hochul es que dentro del presupuesto preliminar que presentó a la Legislatura hay “obsequios para los ricos”, como el préstamo de $455 millones para la pista de carreras de caballos de Belmont Park, subsidio que se pretende entregar un año después de que la mandataria respaldara $850 millones para un nuevo estadio de los Buffalo Bills, que benefició a un empresario millonario.
El gran temor es que si se dejan por fuera proyectos de ley urgentes para las comunidades, aumentará el éxodo de familias trabajadoras de color fuera de Nueva York, como mostró un informe del Instituto de Política Fiscal en enero pasado, que señaló que los altos costos de la vivienda y no los altos impuestos a los ricos, son el factor principal que ha promovido que familias opten por irse de la Gran Manzana.
Cea Weaver, coordinadora de la Campaña de Vivienda Justa para Todos destacó que no son los millonarios ni los multimillonarios quienes se están yendo en masa de Nueva York, sino las familias trabajadoras negras y latinas que ya no pueden pagar el elevado costo de vida, por lo que urgió a Albany a moverse hacia la dirección correcta dando luz verde a piezas de ley clave.
“Si queremos que Nueva York sea un lugar donde todos puedan triunfar, no solo un lugar de recreo para los ricos, debemos aprobar protecciones reales para los inquilinos, como el proyecto Buena causa y el Programa de vales de acceso a la vivienda, que puede ayudar a todos los neoyorquinos a pagar el alquiler, quedarse en sus hogares y tener acceso a una vivienda segura y estable”, dijo la activista.
La activista destacó que ante la ausencia de protecciones significativas de vivienda en el presupuesto ejecutivo de la Gobernadora para el año fiscal 2024 y apoyo a los grandes desarrolladores inmobiliarios, el error puede enmendarse con la aprobación del llamado proyecto de desalojo por buena causa y el Programa de vales de acceso a la vivienda.
Nishat Tabassum, coordinador de la Coalición del Fondo de trabajadores excluidos, insistió en que a pesar de que los trabajadores pagan millones de dólares en impuestos y ayudaron a mantener a flote a Nueva York durante la pandemia, siguen siendo rezagados en el acceso a beneficios de seguridad ofrecidos a otros neoyorquinos y pidió acciones.
“En lugar de invertir millones en otro estadio fallido, la gobernadora Hochul puede invertir en un programa que realmente hará que Nueva York esté más preparada para el futuro y más resistente en caso de que se presente otra crisis”, dijo el defensor de los trabajadores instando a que se de apoyo a los más vulnerables. “Es hora de cerrar finalmente las brechas en nuestra red de seguridad e invertir en los trabajadores excluidos”.
Dawedo Sanon, miembro del Movimiento Santuario, destacó la urgencia de que se aprueben protecciones que aseguren la vivienda a quienes obtienen su libertad de las cárceles, quienes también contribuyeron en medio de la pandemia a ayudar en la crisis.
“Cuando ocurrió la pandemia y Nueva York necesitaba desinfectantes para manos, las personas encarceladas dieron un paso al frente. No obtienen ningún crédito, y cuando regresan a casa, no tienen una red de seguridad. Cuando volvemos a casa, no podemos solicitar seguro de desempleo”, dijo el neoyorquino. “Y cuando solicitamos empleos, 9 de cada 10 veces, cumplimos con todos los requisitos, pero una vez que regresa la verificación de antecedentes, es un no”.
Tal Frieden, vocero de la campaña “Raise Up NY” y coordinador de la campaña ALIGN, insistió en la urgencia de que se aumente el salario mínimo, que actualmente está en $15 la hora, pues acotó que millones de neoyorquinos no alcanzan a llegar bien a fin de mes.
“La Ley Raise the Wage (aumento al salario) beneficiaría a 2,9 millones de neoyorquinos y les pondría un aumento anual promedio de $3,300 en sus bolsillos, o $63 adicionales por semana. En comparación, la propuesta de presupuesto de la Gobernadora Hochul, que solo ajustaría mínimamente el salario mínimo de Nueva York, daría como resultado aumentos que se traducirían en apenas $13 por semana para el trabajador promedio”, dijo el activista. “Los neoyorquinos están viviendo la crisis del costo de vida más grave en 40 años, y la propuesta de la Gobernadora simplemente no es suficiente”.
La Gobernadora Hochul ni su oficina se han referido a las exigencias que los manifestantes plantearon dentro del Capitolio.
Proyectos de ley que exigen se aprueben a favor de comunidades vulnerables
- Buena causa: requeriría que los propietarios justifiquen los aumentos de alquiler superiores al 3% (o el 150% del índice de precios al consumidor) y daría a los inquilinos el poder de impugnar los desalojos que sean arbitrarios, de represalia o discriminatorios. El proyecto de ley protegería a 1,6 millones de hogares de Nueva York en todos los rincones del estado, casi la mitad de los inquilinos en su conjunto.
- HAVP de vales de vivienda: establecería un programa de subsidio de alquiler en todo el estado para los neoyorquinos de bajos ingresos que no tienen hogar, enfrentan desalojos o corren el riesgo de perder su vivienda. Con $250 millones en fondos el primer año, la legislación crearía 20,000 vales, lo que limitaría la carga de alquiler de los inquilinos al 30%.
- Programa Puente de desempleo: establecería un fondo de $500 millones para proporcionar a los trabajadores excluidos que pierden el trabajo una compensación mensual a la par de lo que reciben los demás trabajadores. Ayudaría a trabajadores indocumentados, independientes, trabajadores por cuenta propia y trabajadores en reingreso a quienes se les niega el acceso a la compensación por desempleo
- Proyecto de aumento del salario mínimo a $21,25 la hora: permitiría a los trabajadores mantenerse al día con los precios que se disparan y el aumento de los costos de vivienda.