Retrasan ejecución de recluso de Texas que se cortó los ojos por preocupaciones sobre su salud mental

Andre Thomas fue condenado por apuñalar fatalmente a su esposa en marzo de 2004 y a sus dos hijos de 4 años y 13 meses, diciendo que Dios se lo había ordenado y que creía que los tres eran demonios

El equipo legal dijo que luego de sacarse el segundo ojo, se lo comió para asegurarse de que el gobierno no pudiera escuchar sus pensamientos.

El equipo legal dijo que luego de sacarse el segundo ojo, se lo comió para asegurarse de que el gobierno no pudiera escuchar sus pensamientos.  Crédito: Texas Department of Criminal Justice | Cortesía

Un juez de Texas retrasó el martes la ejecución programada para el mes de abril de un preso sentenciado a pena de muerte, cuyos abogados dijeron que se sacó los dos ojos, cada uno en un incidente separado, por una enfermedad mental grave.

Andre Thomas tenía pautado para ser ejecutado el 5 de abril, fue condenado a muerte por acuchillar hasta la muerte en marzo de 2004 a su esposa Laura Christine Boren, de 20 años de edad, de la que estaba separado, también a su hijo Andre Lee de 4 años y su hija Leuha Marie Hughes de 13 meses, cortando los corazones de los infantes.

Cuando fue arrestado, le dijo a la policía que Dios le había ordenado que cometiera los crímenes y que creía que los tres eran demonios.

Los homicidios de Boren y sus hijos sorprendieron a la ciudad de Sherman, que cuenta con unos 45,000 habitantes a 65 millas de Dallas, informó CBS News.

Jim Fallon, juez estatal de distrito, emitió una orden retirando la fecha de ejecución. La decisión se dio cuando los abogados de Thomas pidieron tiempo adicional para prepararse para una audiencia en la corte para revisar su caso.

El fallo del juez se produjo el mismo día en que el estado de Texas ejecutó a Gary Green, un criminal que fue condenado por apuñalar fatalmente a su esposa y ahogar a su hija de 6 años en una bañera en 2009.

La Corte Suprema prohibió la pena de muerte para los discapacitados intelectuales, pero no para las personas con enfermedades mentales graves. No obstante, dictaminaron que una persona deber ser competente para ser ejecutada.

“Confiamos en que cuando presentemos las pruebas de la incompetencia del señor Thomas, el tribunal estará de acuerdo en que ejecutarlo violaría la Constitución”, expresó Maurie Levin, abogado de Thomas, en un comunicado. “Guiar a este ciego psicótico a la camilla para su ejecución ofende nuestro sentido de humanidad y no tiene ningún propósito legítimo”.

El equipo legal dijo que luego de sacarse el segundo ojo, se lo comió para asegurarse de que el gobierno no pudiera escuchar sus pensamientos.

La orden de Fallon les proporciona a los abogados del acusado hasta el 5 de julio para presentar su moción pidiendo que se revise la competencia del hombre antes de que pueda proceder su ejecución.

Si el juez decide que la defensa de Thomas han presentado prueba suficientes para seguir adelante, se nombraran a los expertos para que lo examinen y Fallon revisará otras evidencias antes de tomar una decisión.

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