Cómo elegir un buen pollo rostizado en la tienda de comestibles

El pollo rostizado es una opción conveniente para comer que puedes adquirir en las tiendas de comestibles. Está listo para comer, es abundante y versátil. Compartimos las recomendaciones básicas para elegir un buen pollo rostizado.

Las aves y los pescados son considerados por los nutricionistas como una opción de carne más saludable que la carne roja. La Escuela de Salud Pública de Harvard señala que optar por pescado o aves de corral en lugar de carne roja y carne procesada puede reducir el riesgo de varias enfermedades y muerte prematura.

El pollo asado comprado en tiendas tiene pocas desventajas, es nutritivo y más bajo en calorías y grasas que otras opciones como el pollo frito.

Qué pollo elegir en la tienda de comestibles

1. Buen aspecto de la piel

El aspecto dorado y uniforme del pollo suele indicar que la piel es crujiente y de buen sabor. Un pollo con un dorado desigual en la piel puede indicar que el pollo se cocinó durante más tiempo de un lado que del otro o que estaba demasiado apretado y no giraba correctamente mientras se cocinaba.

Observa si la piel del pollo se ha arrugado, eso indicaría que ha estado mucho tiempo en la vitrina y la carne puede estar seca.

2. Revisa la fecha de cocción

Asegúrate de que tu pollo es fresco. Revisa la marca de tiempo que indica cuándo se cocinó el pollo. Estas marcas suelen encorarse en la etiqueta, en la parte superior o inferior del recipiente.

3. El pollo debe mantenerse a una temperatura adecuada

Para evitar intoxicaciones alimentarias, el pollo debe cocinarse a una temperatura correcta y mantenerse a temperaturas seguras en la vitrina.

De acuerdo con Food Safety, la temperatura interior mínima segura para la cocinar un ave entera es de 165°F. Si no es posible ver una temperatura cerca de los pollos que se están cocinando, Mashed sugiere preguntarle a un trabajador qué temperatura usan.

Los CDC sugieren no dejar los alimentos perecederos durante más de dos horas (una hora en climas cálidos) a temperatura ambiente. Las bacterias pueden crecer rápidamente en la zona de peligro entre 40°F y 140°F. Por ello los pollos deben permanecer lo sufrientemente calientes o en refrigeración para evitar las temperaturas peligrosas.

4. Pocos jugos en la charola

Elige aquellos pollos que no tienen demasiados jugos en el fondo de la charola o que tienen una almohadilla absorbente. Un pollo muy empapado puede afectar la textura del pollo rostizado volviéndola poco apetecible.

Es normal que se escurra un poco de jugos naturales de los pollos rostizados luego de su cocción. Sin embargo, el jugo también puede acumularse con el uso de solución salina. En algunas tiendas, los pollos se ponen en salmuera o remojan en una solución salina (sal) previos a cocinarlos para hacerlos más jugosos.

Observa la limpieza del área de preparación

De ser posible, observa qué tan limpia es el área de preparación de los pollos. Los empleados deben la lavar y desinfectar los platos y el equipo usados; también deben mantener prácticas seguras de manipulación de alimentos, como usar redes para el cabello y guantes y lavado frecuente de las manos.

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