Más de 1,900 menores de edad fueron abusados por miembros de la Iglesia Católica en Illinois, según la Fiscalía
Un informe de la Fiscalía General de Illinois reveló que más de 1,900 menores de edad fueron abusados sexualmente por miembros de la Iglesia Católica en los últimos 70 años
Una investigación de la Fiscalía de Illinois reveló los abusos sexuales que sufrieron miles de menores de edad en la entidad. Crédito: Guillaume Souvant | Getty Images
La Oficina de la Fiscalía General de Illinois publicó un reporte de investigación en el que se reveló que más de 1,900 menores de edad fueron abusados por miembros de la Iglesia Católica en la entidad desde la década de 1950. Así lo informó el fiscal Kwame Raoul este martes, 23 de mayo.
El reporte, reseñado por The New York Times, indicó que tanto clérigos como hermanos religiosos abusaron de al menos 1,997 menores de edad en los últimos 70 años. Esto ocurrió en las 6 diócesis del estado, incluyendo la arquidiócesis de Chicago.
De acuerdo con The New York Times, esta cifra está más de cuatro veces por encima del número que la iglesia publicó de forma oficial en el año 2018, cuando inició la investigación.
Asimismo, la investigación reveló 149 nuevos nombres de abusadores sexuales de niños, los cuales ahora deben agregarse a la lista reconocida por la iglesia antes de la investigación. De esta forma, han sido identificados aproximadamente 451 abusadores sexuales, de acuerdo con la investigación llevada a cabo por la Fiscalía.
Muchos de estos nuevos abusadores sexuales fueron identificados gracias a los testimonios de las víctimas, quienes colaboraron con los investigadores.
El abuso sexual infantil por parte de la iglesia en Estados Unidos ha sido un tema preponderante en la opinión pública del país.
En los últimos años, se han revelado numerosos casos de abuso sexual perpetrados por sacerdotes y miembros de la iglesia católica en diferentes partes del país. Estos sucesos han dejado a muchas víctimas con cicatrices emocionales y psicológicas profundas.
Una investigación llevada a cabo por el diario Boston Globe en el año 2002 reveló cómo la jerarquía de la iglesia había encubierto a sacerdotes acusados de abusos sexuales, permitiendo que continuaran abusando de niños y niñas.
A partir del año 2002, los obispos estadounidenses adoptaron una “política de tolerancia” cero hacia el abuso sexual infantil por parte del clero. Además, se crearon comisiones para investigar las denuncias de abuso y se tomaron medidas para prevenir futuros casos.
Actualmente, en Estados Unidos existen organizaciones como la Red de Sobrevivientes de Abuso Sexual Eclesiástico (SNAP) o la Línea Nacional de Ayuda para Víctimas de Abuso Sexual (1-800-656-HOPE), quienes están capacitadas para ofrecer apoyo a las víctimas de abuso sexual por parte de miembros de la Iglesia.
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