Juez de California que confesó a su personal que había matado a su esposa se declara no culpable en su primera comparecencia
Tras declararse no culpable, a Jeffrey Ferguson, juez de California, le fue ordenado entregar su pasaporte, someterse a registros, usar dispositivos de monitoreo del contenido de alcohol en la sangre y usar un rastreador GPS
Ferguson sacó una pistola Glock .40 de su tobillera y le disparó mortalmente a su esposa en el pecho. Crédito: Anaheim Police Department | Cortesía
Un juez de California acusado de disparar fatalmente a su esposa el 3 de agosto se declaró no culpable en un tribunal de Los Ángeles.
Jeffrey Ferguson, de 72 años, quien es juez de la Corte Superior del Condado de Orange, fue acusado de asesinato con mejoras vinculadas con armas de fuego después de que supuestamente discutiera con su esposa, Sheryl Ferguson, de 65 años, mientras él estaba bajo los efectos del alcohol en su casa de Anaheim.
Pocos minutos después de balearla, los fiscales dicen que el hombre envió un mensaje al secretario de la corte y al sheriff.
“Me perdí. Acabo de dispararle a mi esposa. No estaré mañana. Estaré bajo custodia. Lo siento mucho”, supuestamente escribió Ferguson en el texto.
Ferguson se declaró no culpable del cargo de homicidio el martes y el juez de la Corte Superior de Los Ángeles, Ricardo Ocampo, le ordenó entregar su pasaporte, someterse a registros, usar dispositivos de monitoreo del contenido de alcohol en la sangre y usar un rastreador GPS. Asimismo, tiene una fianza de $1 millón de dólares y no puede poseer armas de fuego o alcohol.
El juez y su esposa estaban teniendo una discusión en un restaurante la noche del tiroteo, escribió la Oficina del Fiscal de Distrito del Condado de Orange en un documento judicial, informó Fox News.
Cuando llegaron a su casa, la discusión siguió y Sheryl finalmente le dijo algo parecido a “¿por qué no me apuntas con un arma real?”.
Así, que Ferguson sacó una pistola Glock .40 de su tobillera y le disparó mortalmente a su esposa en el pecho.
El hijo mayor de la pareja llamó al 911 y dijo que el juez había bebido demasiado cuando ocurrió el crimen, de acuerdo con el expediente judicial.
Durante el registro de su residencia, los oficiales hallaron 47 armas y más de 26,000 rondas de municiones en la casa, que son propiedad legal. En las pesquisas los fiscales dijeron que faltaba un rifle que le pertenece al juez.
El abogado de Ferguson, Paul Meyer, dijo que el tiroteo no fue intencional.
“Este fue un tiroteo accidental y no intencional y no un crimen”, expresó Meyer.
El abogado dijo a los periodistas tras la primera audiencia que su cliente confía en que un jurado estará de acuerdo en que no se cometió ningún delito.
El hermano de Sheryl, Larry Rosen, manifestó que era un “infierno” cuando Ferguson lo miró en el tribunal.
“Mi hermana era una persona maravillosa, muy cariñosa, muy desinteresada”, dijo Rosen. “La familia está absolutamente en estado de shock”.
La próxima audiencia del juez está programada para el 30 de octubre.
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