Madre latina murió bailando en su cumpleaños en club ilegal en Queens, Nueva York
Una madre hispana salió a celebrar su 35 cumpleaños, pero murió tras colapsar en un club nocturno sin licencia en Queens (NYC), dejando una niña huérfana. Según su familia los trabajadores del local no llamaron al 911 porque estaban temerosos de la policía
Stephanie Quiñones salió a celebrar su 35 cumpleaños, pero terminó muriendo tras colapsar en un club nocturno sin licencia en Queens (NYC), dejando una niña huérfana de 12 años.
El hecho sucedió en un club nocturno sin nombre ubicado en 24-64 49th Street en Astoria el 31 de julio. En medio de la celebración, Quiñones de repente se desmayó. Según su familia, en lugar de llamar al 911 los trabajadores del local estaban temerosos de la policía y la arrastraron a una habitación trasera, donde la dejaron durante horas hasta que murió, relató New York Post.
El club no tiene una licencia para vender licor, según la Autoridad Estatal de Bebidas Alcohólicas (SLA).
Ven a buscar a tu hermana borracha”
El médico forense aún está investigando para determinar la causa de la muerte. Según el reporte, varios de los presentes dieron palmadas a Quiñones en la cara, aparentemente para revivirla, antes de sacarla de la pista de baile cargada.
Un cantinero luego envió una foto de Quiñones inconsciente a su madre en Florida y comenzó a enviar mensajes de texto a su hermana, Jasmín González, que vive en El Bronx.
“Ven a buscar a tu hermana borracha”, asegura González que le dijeron y ella todavía no sabía la gravedad de la situación. Cuando llegó al club dos horas después y finalmente llamó al 911, los empleados huyeron y la encerraron en el local, donde descubrió que su hermana estaba muerta.
“Yo estaba haciendo compresiones en una persona muerta”, dijo González. “Todos me dejaron sola. Nadie tuvo la decencia de quedarse”. Dice que salió para llamar a la ambulancia que se acercaba, luego volvió a entrar con su hermana, pero cuando los socorristas llegaron a la cuadra los trabajadores habían cerrado la puerta del club. “Todos se fueron porque no querían estar allí cuando llamaran a la policía”, afirmó. Finalmente Quiñones fue llevada al Hospital Mt. Sinai.
La policía de Nueva York (NYPD) dijo que estaban investigando a una persona declarada muerta al llegar al club esa noche, aunque no identificaron a Quiñones por su nombre.
“Lo que más me duele es que no sólo no llamaron al 911, sino que fue cruel que yo fuera allí, dándome esperanzas de que ella estaba viva”, insistió González.
El propietario de un negocio cercano que habló de forma anónima por temor a represalias dijo que ese local inicialmente era una compañía de seguros, pero luego comenzaron a organizar fiestas nocturnas.
La familia de Quiñones comenzó una campaña de GoFundMe que hasta ahora ha recaudado más de $24,000 dólares. Nadie ha sido detenido por el caso.
En un caso similar el mes pasado tres compañeros de vivienda fueron acusados de lanzar el cadáver de su amiga a un contenedor de plástico cerca de un patio de la MTA en El Bronx (NYC).
Frank Vallelonga Jr., el actor cuyo cadáver fue lanzado desde un auto a una calle de El Bronx (NYC) en noviembre, murió de una sobredosis accidental de fentanilo y cocaína, determinó la autopsia anunciada en abril de este año.
Al menos 43 casos de sobredosis de fentanilo, siete de ellos mortales, están vinculados a dos patrones separados de robos en clubes nocturnos de Manhattan y sus alrededores que se remontan a septiembre de 2021.