Apelación a la gobernadora Hochul de una madre por los sueños de nuestras familias militares
Este año, en un momento histórico, el Senado y la Asamblea de Nueva York aprobaron por unanimidad el Programa Alex R. Jimenez Para Familias Militares. Sólo falta la firma de la mandataria
En julio de 2008 mi mundo se derrumbó. Se habían recuperado los restos de mi hijo, el sargento del ejército estadounidense Alex Jiménez, secuestrado en el 2007 durante la guerra de Iraq. Al mismo tiempo, nos vimos inmersos en una batalla para parar la deportación de Yaderlin, la esposa de Alex. Muchas veces quise rendirme y escapar, pero no era una opción. La forma en que nuestro sistema de inmigración trataba a mi familia era un insulto a la valentía de Alex y al sacrificio de Yaderlin.
Con una simple firma, la gobernadora Kathy Hochul tiene el poder de garantizar que esto no vuelva a ocurrir. Este año, en un momento histórico, el Senado y la Asamblea de Nueva York aprobaron por unanimidad el Programa Alex R. Jimenez Para Familias Militares. Esta propuesta innovadora fue promovida por la asambleísta Catalina Cruz y los senadores Nathalia Fernández y Jacob Ashby. Este programa proporcionará a nuestros miembros en servicio activo, veteranos y familiares directos, la asistencia crucial y los recursos necesarios para navegar el sistema de inmigración para que puedan obtener estatus migratorio legal y la ciudadanía estadounidense.
Si este proyecto hubiese existido antes, nuestra familia hubiera tenido apoyo crítico durante una de nuestras peores batallas. Los representantes del gobierno tienen la habilidad de desmantelar las barreras burocráticas y fomentar la cooperación entre las autoridades federales de inmigración, liderazgo militar y el gobierno estatal para beneficio de nuestros miembros del servicio y a sus familias inmigrantes. Esto es especialmente importante para las familias de militares vulnerables como la mía, que no tienen forma de pagar miles de dólares por asesoramiento legal en casos de inmigración complejos.
Mi hijo, Alex, sacrificó su vida por el país que amaba. Al firmar este proyecto de ley, honramos su legado. Le demostramos a nuestra nación que la reforma de inmigración bipartidista no es un sueño imposible y le mostramos a nuestras familias militares inmigrantes que son parte integral de nuestra nación.
Me dirijo a usted, Gobernadora Hochul. De madre a madre, como neoyorquina, como estadounidense orgullosa de nuestra gran nación: firme este proyecto de ley. Demostremosle a nuestras familias militares que estamos a su lado, que valoramos su servicio y que protegeremos su sueño americano.
María Durán es la madre del Soldado Caído, Sargento Alex Jiménez