Editorial: Mujer, la brecha aún sigue abierta
Es lamentable que lleguemos otro Día de la Mujer haciendo hincapié en asuntos de vieja data como la igualdad salarial
Un reporte internacional dado a conocer por el Banco Mundial nos hace poner los pies sobre la tierra para recordarnos la batalla tan pesada con la que tienen que lidiar las mujeres por la falta de políticas de equidad.
Con el informe titulado ‘La mujer, la empresa y el derecho’, el Banco Mundial deja claro que ni siquiera en las economías más ricas del mundo se brinda igualdad de oportunidades a las mujeres. En general ellas solo acceden a dos tercios de los derechos legales de los que gozan los hombres.
Se analizaron las economías de 190 países. Y una vez más quedó demostrado que las mujeres son quienes tienen largas jornadas y ganan solo 77 centavos por cada dólar que se paga a los hombres.
Incluso a la hora de la jubilación perciben menos pensiones porque en algún momento tuvieron que reducir su jornada o dejar de trabajar un tiempo para cuidar de algún familiar.
La radiografía que pinta este reporte no es ajena a lo que viven las mujeres en Estados Unidos, especialmente las de las minorías.
Si bien hace 61 años que se aprobó en este país la Ley de Igualdad de Salario (Equal Pay Act) los avances que hemos visto caminan a paso de tortuga. De hecho una investigación del Centro Americano para el Progreso (CAP) proyecta que si las cosas se mantienen como hasta ahora, las mujeres trabajadoras a tiempo completo y durante todo el año no lograrán la paridad salarial con los hombres hasta el 2056.
Cómo es posible que haya que esperar tres décadas más para que la mujer tenga los mismos ingresos que un hombre. Específicamente para las latinas y negras significa que tendrán que seguir ganando 54 centavos y 64 centavos, respectivamente, por cada dólar ganado por hombres blancos no hispanos.
Es lamentable que lleguemos de nuevo a la “celebración” del Día Internacional de la Mujer haciendo hincapié en asuntos de vieja data como la igualdad salarial.
No podemos quedarnos de brazos cruzados, hay que seguir insistiendo en la aprobación de leyes que protejan y otorguen los beneficios que merecen las mujeres. Necesitamos acelerar el cierre de la brecha que por tanto tiempo ha tenido a la mujer en segundo plano.
El Congreso y el Gobierno federal no pueden olvidar que la mitad de la población en Estados Unidos es femenina. Que las empresas con propietarias latinas han crecido un 87% en la última década, siendo el grupo empresarial con mayor crecimiento generando $65 millones en ingresos. Que el empoderamiento de la mujer es beneficioso para todos.
La mujer ya ha pasado todas las pruebas, ha ido superando barreras. No tiene nada más que demostrar para ser tratada con igualdad de oportunidades.