Departamentos de Justicia y Trabajo de EE.UU. sanciona a compañía que ofreció trabajo “solo para blancos” y nacidos en el país

La empresa Arthur Grand Technologies Inc. violó la Ley de Inmigración y Nacionalidad al publicar un anuncio de trabajo "únicamente" para estadounidenses blancos dentro de 60 millas de Dallas, Texas

El Departamento de Trabajo criticó a la compañía y reiteró el compromiso de responsabilizar a los contratistas.

El Departamento de Trabajo criticó a la compañía y reiteró el compromiso de responsabilizar a los contratistas. Crédito: J. Scott Applewhite | AP

Los departamentos de Justicia y Trabajo de Estados Unidos penalizaron a una empresa de tecnología de Virginia que divulgó una oferta de empleo “solo para blancos” y nacidos en el país.

De acuerdo con el DOJ, la compañía Arthur Grand Technologies Inc. violó la Ley de Inmigración y Nacionalidad al publicar en el mes de marzo del año pasado un anuncio de trabajo “únicamente” para estadounidenses blancos dentro de 60 millas de Dallas, Texas.

Los dos entes gubernamentales llegaron a acuerdos por separado con la empresa. Asimismo, la fiscal general adjunta, Kristen Clarke, condenó las acciones de Arthur Grand y recalcó la ilegalidad de sus prácticas discriminatorias, a su vez que Michele Hodge, del Departamento de Trabajo, criticó a la compañía y reiteró el compromiso de responsabilizar a los contratistas.

El anuncio, publicado por un reclutador de la filial de India de Arthur Grand, salió en Indeed y causó indignación pública.

Además, disuadió de manera ilícita a personas, incluyendo ciudadanos estadounidenses que nacieron en el extranjero y ciertos ciudadanos que no son de Estados Unidos, de presentar su solicitud.

Como parte de los acuerdos, Arthur Grand pagará sanciones civiles y compensaciones a las personas afectadas, verificará sus políticas de trabajo y ofrecerá capacitación sobre el cumplimiento de las leyes federales.

Por su parte, la Liga de Ciudadanos Latinoamericanos Unidos (LULAC), la más antigua organización hispana de derechos civiles de Estados Unidos, rechazó lo sucedido.

Es una vergüenza que las empresas privadas requieran este nivel de supervisión para mantener la decencia básica. A falta de pruebas concretas de cambio, debemos asumir que tales prácticas discriminatorias persistirán”, se lamentó LULAC.

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