Hispana y su bebé baleados a muerte en Connecticut: sigue cacería del pistolero
Con alertas a nivel nacional la policía busca a Lance Morales, sospechoso de matar a balazos a una madre latina y su bebé a plena luz del día en Connecticut
Con alertas a nivel nacional la policía de Hartford (Connecticut) sigue tras la pista de Lance “Macho” Morales, principal sospechoso de matar a balazos desde un auto a la joven madre Jessiah Mercado (20) y su bebé de 4 meses, Messiah Díaz.
El doble homicidio sucedió en la calle a plena luz día poco antes de las 3 p.m. del martes, cerca de una concurrida tienda de comestibles. Horas después Morales, de 23 años, fue identificado como sospechoso, pero no ha sido detenido, pese a la intensa búsqueda.
Una tercera persona baleada fue reportada en condición estable. Es un hombre de unos 20 años, pero su nombre no ha sido divulgado. Tampoco se sabe si tiene algún vínculo con los fallecidos.
No está claro el motivo del crimen ni el posible vínculo entre el pistolero y sus víctimas. Morales presuntamente apretó el gatillo en una discusión sobre un automóvil, según News 8. “Ninguna madre o niño debería tener que pasar por eso, es desgarrador”, dijo Lisa Long, residente de Hartford.
El teniente policial Aaron Boisvert dijo que un automóvil se detuvo junto a un segundo vehículo y comenzó a disparar. “Es absolutamente horrible, absolutamente horrible”, afirmó el martes.
Morales tiene en su historial más de 20 cargos, entre delitos graves y menores, que se remontan a los últimos cuatro años, incluyendo haber sido acusado en 2020 de disparar en el estacionamiento de una tienda de conveniencia. Más tarde, el año pasado embistió una patrulla policial.
Para localizarlo el Departamento de Delitos Graves de Hartford está trabajando con la Policía Estatal de Massachusetts y la Policía de Springfield, donde residían las víctimas. También están utilizando recursos e información federales. Entre Hartford y Springfield hay sólo 26 millas de distancia.
Se presume que las personas son inocentes hasta que se pruebe su culpabilidad en un tribunal. Quien posea información debe llamar a 911.