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Los sabores de Palermo Argentinian Bistro se duplican

El popular restaurante argentino de Hell’s Kitchen llega a Gramercy Park con su distintivo sabor porteño

La especialidad de la casa es la parrilla tradicional argentina, con cortes cocinados a fuego abierto y lento, además de ceviches, crudos y mariscos

La especialidad de la casa es la parrilla tradicional argentina, con cortes cocinados a fuego abierto y lento, además de ceviches, crudos y mariscos  Crédito: Palermo Argentinian Bistro | Cortesía

Los amantes de la buena comida argentina en Nueva York están de celebración, ya que Palermo Argentinian Bistro, el restaurante que ha conquistado Hell’s Kitchen, acaba de abrir su segundo local en el vecindario de Gramercy Park para así seguir deleitando con su buena carne, empanadas, milanesas y demás delicias del país sureño.

Al frente del proyecto están Orhan Cakir (fundador de Pierre Loti), el Chef Ejecutivo y socio Carlos Barroz (Palermo Theatre District) y el socio gerente Víctor Medina (La Pulpería). Juntos, buscan transportar a los comensales al corazón de la cultura argentina, con una propuesta gastronómica pensada para compartir y disfrutar.

La especialidad de la casa, al igual que en su primer local, es la parrilla tradicional argentina, con cortes cocinados a fuego abierto y lento, además de ceviches, crudos, mariscos y una imponente torre de mariscos. Todos los platos se sirven en porciones generosas, ideales para compartir.

El Chef Barroz, nacido en Argentina en una familia de restauranteros, aprendió el arte del fuego y la carnicería de su abuelo. Desde su llegada a Nueva York en 2001, ha trabajado en cocinas de inspiración francesa, italiana y peruana. Palermo es su tributo personal a los sabores de su tierra natal, donde se mezclan las influencias italianas y españolas con la pasión argentina por la carne y la parrilla.

(Desde la izquierda) El dueño Orhan Cakir, el socio gerente Víctor Medina y el Chef Ejecutivo y socio Carlos Barroz./Foto: Cortesía Palermo

Carne o mariscos, hay para escoger

Si se trata de comer carne, para empezar se recomienda el Beef Tartare con lomo tierno cortado a mano, alcaparras, aceite de chimi y huevo de codorniz con caviar, o quizás unas buenas empanadas con el típico relleno de guiso de res.

Las clásicas empanadas argentinas no pueden faltar en el menú del lugar./Cortesía Palermo

Pero si el ánimo va más por los mariscos, el Pulpo a la Parrilla con ensalada rusa y ají amarillo; y el Ceviche Rojo, con pulpo, camarón y pescado blanco son dos de los favoritos.

Como plato fuerte, para los carnívoros entre los imperdibles está la Parrillada para dos, un festín que incluye entraña, bife de chorizo, costillas, mollejas, pollo, chorizo y morcilla, acompañado de chimichurri, salsa criolla y dos guarniciones, como espárragos a la parrilla con alioli de azafrán o humita con cebolla, pimentón de la Vera y mozzarella derretida.

Diferentes cortes de carne con acompañamientos originales destacan entre las opciones./Cortesía Palermo

La carta ofrece desde clásicos reinventados como la Milanesa de NY Strip Steak con alioli de azafrán, hasta la Palermo Burger, una mezcla de ribeye añejado y short rib, con lechuga Boston, queso cheddar de Vermont y alioli de trufa y chimi en pan brioche.

En la sección de parrilla, destacan el Picanha de 12 oz, el Ribeye de 16 oz, y el Tomahawk para dos, además de opciones como el Pollo Murray con salsa de naranja y curry, mollejas, chorizo y morcilla.

Y si se prefiere mariscos, la sección de Raw Bar y Crudos ofrece una selección fresca y sofisticada: Trucha Cruda, servida con aguachile negro ahumado, aceite de chimi y huevas de salmón; Ceviche Rojo, una vibrante mezcla de pulpo, camarón y pescado blanco con cilantro, cebolla morada, jalapeño y tostadas crujientes; y una gran Torre de Mariscos, que incluye ostras, camarones, una langosta entera de 1 ¼ lb, un trío de crudos, patas de king crab y oyster shooters. Y como plato caliente está la opción del halibut servido con salsa gaucha y broccolini.

Quienes prefieren otra opción, la torre de mariscos es ideal./Cortesía Palermo

Los postres incluyen los clásicos alfajores rellenos de dulce de leche y espolvoreados con coco, y la torta de pan o bread pudding con helado de dulce de leche.

Vinos argentinos y coctelería 

La carta de vinos, curada por el sommelier Tayfun Saracoglu (Advanced Court of Master Sommeliers), celebra lo mejor del terroir argentino con una selección 100% de Argentina, en su mayoría orgánica y biodinámica. Destacan vinos como Zuccardi Concreto Malbec, Catena Zapata “River Stones”, El Enemigo Gran Enemigo, y espumantes como Zuccardi ALMA 4 Blanc de Blanc.

Como es de esperarse, los vinos argentinos conforman la carta de bebidas./Cortesía Palermo

La coctelería ofrece creaciones con un giro argentino, como el Tinto de Verano con pisco Demonio de los Andes, lima, menta, malbec y Sprite; el Chimichurri Martini con infusión de vodka Tito’s y aceitunas azules; y el Fuego, una mezcla vibrante de mezcal, tequila, ron, maracuyá y granada con coco rallado.

Palermo Gramercy cautiva desde la entrada con el encanto de una finca rústica. En el interior, un bar de mármol blanco en forma de L con azulejos azul profundo y taburetes dorados es el corazón del lugar. Dos salones distintos permiten elegir entre una experiencia casual al frente o una cena íntima en la parte posterior, con paredes de ladrillo blanco, espejos gigantes y esculturas de gauchos.

La decoración emula a la que se puede encontrar en las haciendas argentinas./Cortesía Palermo

La amplia terraza exterior es ideal para disfrutar de un cóctel fresco y contemplar el ambiente neoyorquino al estilo porteño

El nuevo Palermo Argentinian Bistro está ubicado en el 53 Irving Place, New York, NY 10003. Para más información y reservas, visite: palermoargentinianbistro.com

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