Políticas antimigratorias de Trump como cancelar permisos de trabajo provocarán un gasto extra anual de $2,150 por familia

Un estudio de FWD.us alerta que los efectos mayores lo registrarán la industria agrícola y de construcción

Trabajadores de la industria agrícola en Fresno, California — Trabajadores agrícolas en California. Crédito: Gosia Wozniacka | AP

27 Jun 2025, 09:07 AM EDT

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Nueva York ? Las políticas antimigratorias de la Administración Trump que incluyen la cancelación de permisos de trabajos para millones de trabajadores en industrias relacionadas con la construcción y la agricultura se traducirá en un aumento anual de $2,150 por familia, arrojó un nuevo estudio divulgado por FWD.us.

“De hecho, todos los estadounidenses, en particular las familias de clase trabajadora, están a punto de ver un aumento sustancial e innecesario en los precios de bienes y servicios como la alimentación y la vivienda, que se suma a otras políticas económicas como los aranceles globales, que también podrían incrementar los precios. Las políticas migratorias anunciadas harán que las familias estadounidenses paguen $2,150 adicionales por bienes y servicios cada año para finales de 2028, o el equivalente a la factura promedio de supermercado de una familia estadounidense durante tres meses o a sus facturas combinadas de electricidad y gas de todo el año”, indica el informe divulgado este jueves.

El estudio destaca que industrias como la de construcción, agricultura, salud, vivienda, atención domiciliaria y a personas mayores así como la manufactura están impulsadas por los inmigrantes, y se están viendo afectadas por una grave escasez de trabajadores, lo que aumentará los costos y generará espera y atrasos.

El análisis, que forma parte de la iniciativa “Protect America’s Workforce” (Proteger la fuerza laboral de Estados Unidos), que busca preservar protecciones como DACA (Acción Diferida para los Llegados en la Infancia), TPS (Estatus de Protección Temporal) y la libertad condicional humanitaria y abrir nuevas vías legales, arrojó además que el aumento significaría una constricción adicional en el presupuesto familiar.

“Este aumento anual ($2,150) representaría un impuesto que eliminaría los ahorros anuales de muchas familias estadounidenses y equivaldría a una de sus nóminas quincenales cada año. A diferencia de períodos de inflación anteriores, los estadounidenses no han ahorrado al mismo ritmo que en años anteriores y no pueden absorber con la misma facilidad estos aumentos de precios, lo que presionaría aún más sus presupuestos”, señala el reporte.

El análisis de los resultados añade que, aunque la inflación fue una de las preocupaciones principales en las pasadas elecciones, incluso superando el tema migratorio, y lo continúa siendo, las medidas de Trump en curso socavarán directamente el objetivo de nivelar, o incluso reducir, los costos de los bienes y servicios cotidianos y esenciales.

“Al mismo tiempo, millones de familias con familiares inmigrantes están a punto de enfrentar el verdadero costo humano de la pobreza repentina y la separación familiar como resultado de estas políticas migratorias, dejando a muchos padres inmigrantes sin poder mantener a sus familias y empujando a decenas de miles de niños ciudadanos estadounidenses a la pobreza. Además, veríamos miles de millones de dólares perdidos en contribuciones a la economía estadounidense, y la pérdida casi inmediata de trabajadores inmigrantes, entre otros impactos negativos”, anticipa el estudio.

Las políticas que elevarán los costos de bienes y servicios incluyen, de acuerdo con FWD.us, la cancelación de los permisos de trabajo de millones de personas con estatus migratorio temporal, como las que cuentan con TPS que no pueden regresar a sus países, los inmigrantes con libertad condicional de Afganistán y los beneficiarios de DACA, entre otros.

También mencionan la deportación masiva de millones de inmigrantes con o sin estatus migratorio legal y las reducciones significativas en la inmigración legal en los próximos años.

Las industrias más afectadas por el aumento en precios

En cuanto al impacto por sector, las estimaciones de FWD.us apuntan a que, debido a que una gran parte de los inmigrantes afectados trabaja en la agricultura y la construcción, los bienes y servicios producidos por estas industrias experimentarían los aumentos de precios más significativos.

“Por ejemplo, se espera que los precios al productor aumenten un 14.5 % para la mayoría de los productos alimenticios y un 6.1 % en la construcción. La clase trabajadora estadounidense gasta la mayor parte de sus ingresos en alimentos y vivienda, y, por lo tanto, experimentaría los mayores aumentos del costo de vida”, lee el informe.

Los aumentos también afectarían al sector del ocio y la hostelería (3.9 %), como las estancias en hoteles y la comida y los servicios de restauración; el transporte (2.2 %), como los viajes compartidos; y otros servicios (1.5 %), como el cuidado infantil y el mantenimiento del jardín.

“Estos aumentos porcentuales innecesarios superan los aumentos de precios asociados con otras políticas potencialmente inflacionarias, como los nuevos aumentos arancelarios generalizados”, recalca la entidad.

La organización añadió que el estimado es uno conservador dado que el Gobierno insiste en expulsar a aún más inmigrantes indocumentados de la fuerza laboral, ya sea mediante arrestos y deportaciones u obligándolos a irse por su cuenta.

“El informe de hoy concluye que, al intentar revocar los permisos de trabajo de los inmigrantes, deportar a los trabajadores y reducir drásticamente la inmigración legal, la fuerza laboral estadounidense tendría millones de trabajadores menos de lo proyectado en los próximos años, incluyendo cientos de miles de trabajadores menos en la agricultura, la construcción, el ocio y la hostelería, lo que se traduciría en mayores costos para cada familia estadounidense”, resumió Phillip Connor, demógrafo sénior de FWD.us.

Para el presidente de FWD.us, Todd Schulte, la única manera de estabilizar los costos de bienes y servicios es descartando las políticas sobre las que insiste el presidente Donald Trump.

“Si queremos estabilizar los costos de los bienes y servicios para los estadounidenses y, al mismo tiempo, defender los mejores valores familiares estadounidenses, el Congreso y la administración deben mantener los permisos de trabajo para los inmigrantes protegidos temporalmente, detener los planes de deportación masiva y encontrar nuevas vías para legalizar a los inmigrantes, a la vez que invertimos en el pleno funcionamiento de nuestro sistema de inmigración legal”, expuso Schulte.