Del Monte Foods se declara en bancarrota y busca comprador
Del Monte Foods se declaró en bancarrota y buscará comprador. La empresa enfrenta una baja demanda por cambios en los hábitos de consumo
Durante los últimos años, Del Monte ya había enfrentado dificultades económicas, incluyendo despidos y recortes operativos para reducir gastos. Crédito: Jac Cowan | Shutterstock
Después de más de un siglo de historia y presencia constante en los supermercados con sus productos enlatados, Del Monte Foods anunció que se ha declarado en bancarrota bajo el Capítulo 11 y que buscará un comprador como parte de un proceso de reestructuración financiera.
La compañía, con sede en Walnut Creek, California, informó que llegó a un acuerdo de apoyo a la reestructuración (RSA, por sus siglas en inglés) con sus acreedores.
Como parte de este acuerdo, recibió un compromiso de financiamiento por $912.5 millones de dólares para mantener sus operaciones durante el proceso de venta como empresa en funcionamiento.
Según los documentos entregados al Tribunal de Quiebras del Distrito de Nueva Jersey, Del Monte estima que sus activos y pasivos se encuentran entre $1,000 millones y $10,000 millones de dólares.
La venta propuesta incluirá todos los activos de la empresa, y se dará prioridad a la mejor oferta que se reciba.
El presidente y director ejecutivo de Del Monte Foods, Greg Longstreet, explicó la decisión mediante un comunicado:
“Tras una evaluación exhaustiva de todas las opciones disponibles, determinamos que un proceso de venta supervisado por la corte es la forma más efectiva de acelerar nuestra recuperación y crear una Del Monte Foods más fuerte y duradera”.
Esta acción convierte a Del Monte en la cuarta empresa del sector de alimentos y bebidas en declararse en bancarrota durante este año, de acuerdo con datos de la firma de análisis financiero Debtwire.
Uno de los principales factores detrás de la caída financiera de Del Monte ha sido el cambio en los hábitos de consumo.
La preferencia del público ha ido desplazándose de los productos enlatados con conservadores hacia alternativas más saludables, lo cual ha afectado significativamente la demanda.
Sarah Foss, jefa global de asuntos legales y de reestructuración de Debtwire, señaló:
“En general, Del Monte afirma que la demanda de los consumidores ha disminuido, lo que ha provocado costos adicionales relacionados con el exceso de inventario que han tenido que almacenar y tratar de sacar del mercado mediante gastos promocionales”.
Durante los últimos años, Del Monte ya había enfrentado dificultades económicas, incluyendo despidos y recortes operativos para reducir gastos.
Según Bloomberg, en 2023 la compañía ya había iniciado un proceso de reorganización de su deuda.
El futuro de esta histórica marca de alimentos dependerá ahora del éxito del proceso de venta y de su capacidad para adaptarse a un mercado que prioriza la frescura y lo natural sobre la conservación prolongada.
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