Concejo propone $50 millones para subsidiar MetroCard a los pobres
La medida pretende ayudar a más de 300 mil neoyorquinos, pero De Blasio insiste en que esa es responsabilidad del Estado y no de la Ciudad
La administración De Blasio sigue firme en su negativa de financiar con $200 millones de dólares un plan que subsidie la mitad de los costos de la MetroCard a unos 800,000 pobres de la Gran Manzana. Pero un grupo de concejales incluyó dentro del presupuesto preliminar una partida de $50 millones, que de ser aprobada, le daría un respiro a 380,000 neoyorquinos.
Así lo anunció este miércoles el presidente del Comité de Transporte del Concejo, Ydanis Rodríguez, quien urgió al alcalde a que respalde esa propuesta, como una manera de ayudar a combatir la pobreza y brindar mejores oportunidades a todos los habitantes de la Gran Manzana.
“El acceso al transporte público es una necesidad básica que permite que las personas de bajos recursos puedan ir a sus trabajos, a las escuelas, a las universidades comunitarias, al médico y hasta a los museos, y la Ciudad puede tomar el liderazgo para crear mejores condiciones para las familias trabajadoras”, comentó el político. “Yo mismo viví lo que era no tener para un tren y tener que caminar hasta la universidad, y allí decidir entre comerme un sandwich o irme en transporte público”.
El plan del Concejo y de las organizaciones que promueven la reducción de los costos de la MetroCard para los más necesitados pretende que en el 2018 el subsidio cobije inicialmente a las familias de pobreza extrema, que ganen entre $10,000 y $12,000 al año, y que paulatinamente los fondos de ayuda sigan subiendo hasta llegar a $100 millones en el 2019 y $200 millones en el 2020, cobijando a familias que ganen hasta $24,000.
“Estos $50 millones del Concejo son un gran comienzo y ahora el alcalde ya no podrá tener excusas”, comentó Rebecca Bailin, directora de la campaña “pasajes justos” de la organización Riders Alliance, tras mostrarse confiada en que De Blasio respaldará la iniciativa. “Los neoyorquinos de bajos ingresos necesitan que el alcalde los apoye, como ha hecho con la clase media. Es un subsidio para la gente, no para la MTA”.
Nancy Rankin, vicepresidenta de Policy Research and Advocacy, mencionó que la propuesta que el Concejo hizo en el presupuesto preliminar es consistente con la agenda que el alcalde ha promovido para combatir la inequidad.
“Aplaudimos el apoyo mostrado por el Concejo hacia este esfuerzo y esperamos que la administración De Blasio haga del transporte una realidad asequible para todos los neoyorquinos”, dijo Rankin,destacando que el nuevo plan ayuda al 5% de los neoyorquinos.
Freddi Goldstein, vocero del alcalde De Blasio, reiteró que la posición del mandatario no ha cambiado, al considerar que la Ciudad no es la que debe aportar los fondos sino el gobierno estatal.
“El programa piloto, al igual que la propuesta original, es noble, pero el alcalde ha sido muy claro en que la MTA es responsabilidad del Estado y ellos deben considerar financiar el programa”, advirtió Goldstein, destacando que la Ciudad ya invierte $60 millones en subsidios para estudiantes, personas mayores y discapacitados.
La salvadoreña Rosa Mancilla, quien tiene tres hijos,comentó que la aprobación del plan del Concejo, sobre el cual De Blasio debe pronunciarse formalmente a finales de abril, la ayudaría muchísimo, pues en un solo año cada miembro de su familia podría ahorrar $726 en los costos de la Metrocard.
“A veces no hay dinero y no más alcanza para los trenes de un día y toca pedir prestado”, comentó la madre. “Si lo aprueban, serviría para la colegiatura de mis hijos o para darles mejor comida”.
El concejal Rodríguez también destacó que otra propuesta pretende expandir con $12 millones el programa Citi Bike, a fin de que personas de bajos recursos tengan acceso a la bicicleta rentada como un plan de transporte, llevando la iniciativa a zonas pobres como el Sur de El Bronx, Bushwick, Sunset Park y Bedford-Stuyvesant.