Republicanos del Senado bajo presión para aprobar polémico recorte de impuestos
El plan tributario afronta gran oposición en las encuestas
WASHINGTON- Los republicanos del Senado afrontaron este lunes fuertes presiones del presidente Donald Trump para aprobar como “regalo navideño” un polémico plan de recortes de impuestos por $1,5 billones que, según sus detractores, perjudicará a la clase media, a los pobres y a estados con altos niveles de impuestos, como Nueva York y California.
Se trata de una semana decisiva para el Senado, donde los republicanos aún no tienen los 50 votos para aprobar el plan tributario, pero el tiempo apremia, ante un calendario legislativo reducido y una agenda cargada de asignaturas pendientes.
Trump almorzó hoy a puerta cerrada con líderes republicanos del Comité de Finanzas del Senado para presionar por la aprobación del “Acta para Recortes de Impuestos y Empleos”, que ya aprobó la Cámara de Representantes sin apoyo demócrata.
Trump dijo en Twitter que el plan “va por buen camino” y tiene “gran apoyo”, y que algunos ajustes producirán más beneficios para la clase media. El mandatario, cuya familia tiene inversiones en más de 500 entidades, estaría entre los beneficiados por esos ajustes.
The Tax Cut Bill is coming along very well, great support. With just a few changes, some mathematical, the middle class and job producers can get even more in actual dollars and savings and the pass through provision becomes simpler and really works well!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) November 27, 2017
Más adelante, en un evento con líderes nativoamericanos de la Segunda Guerra Mundial, Trump aseguró nuevamente que el plan ofrecerá “un tremendo recorte de impuestos, el mayor en la historia de nuestro país”, pese a que las propias cifras del Departamento del Tesoro muestran que el mayor fue el aprobado en 2012, bajo la Administración Obama.
Se prevé que mañana el Comité de Finanzas someta a votación el plan tributario para su voto definitivo en el pleno antes del fin de semana.
Propaganda para el plan
Durante su acostumbrada rueda de prensa, la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders, dijo que Trump espera que el Senado apruebe el masivo plan tributario como “un gran y bello regalo navideño al pueblo estadounidense”.
Para seguir “vendiendo” las bondades de ese plan, Trump viajará a St. Charles (Missouri) el próximo miércoles, donde ofrecerá un discurso sobre la necesidad de poner en marcha una reforma y los recortes de impuestos, dijo Sanders.
La tasa de desempleo se encuentra en su punto más bajo desde 2000, los salarios comienzan a subir, la Bolsa de Valores sigue al alza, y “el optimismo está por las nubes”, y el plan tributario no sólo mejorará las condiciones del país sino que será una buena antesala para la época navideña, argumentó la portavoz.
Fuerte golpe para los pobres, dice la CBO
Sin embargo, la Oficina de Prespuesto del Congreso (CBO, en inglés), dijo en un informe divulgado anoche que el plan tributario no sólo reducirá los ingresos sino que abultará más el déficit por alrededor de $1,400 millones entre 2018 y 2027, y ocasionará profundos recortes para beneficios federales que ayudan a los pobres.
Eso se debe en parte a que la versión del Senado prevé eliminar por completo parte de “Obamacare” que exige la compra de seguro a todo estadounidense, so pena de multas. Sin esa cláusula, que es pilar de la reforma sanitaria de 2010, se eliminarían también los subsidios que da al gobierno para ayudar en la compra de seguro médico.
Es decir, el Congreso estaría recortando los impuestos pero a expensas de la gente pobre o de modestos ingresos, porque con la eliminación de los subsidios dentro de “Obamacare”, unas 13 millones de personas quedarían sin plan de salud.
Los más afectados en particular, para el año 2025, serían los trabajadores que ganan menos de $40,000 al año, según la CBO.
Otros daños de la iniciativa
Aunque los legisladores quieren hacer permanentes los recortes de impuestos para las corporaciones –como aliciente para la creación de empleos, dice la Casa Blanca-, el plan tributario ofrece esos recortes a los individuos de forma temporal, ya que la mayoría tendría fecha de vencimiento después de 2025.
Así, a partir de 2027, la mayoría de las personas de clase media verían un aumento en sus impuestos, a menos que tengan salarios superiores a los $75,000.
El plan casi duplica la deducción estándar en los impuestos, pero elimina por completo las exenciones personales y las deducciones por los impuestos locales y estatales, lo que afectaría sobremanera a residentes en estados como California, Nueva York, Nueva Jersey, y Missouri.
Un informe reciente del sitio financiero “Smart Assets”, por ejemplo, señaló que en 20 de las ciudades principales de EEUU, la mayoría de los estadounidenses verá una reducción de impuestos bastante modesta, y los mayores recortes irán a los que tienen mayores salarios.
Así, una familia con ingreso medio de $58,856 en Nueva York, tendría un recorte de apenas $578; una con ingreso medio de $54,432 en Los Angeles, tendría un recorte de $445, mientras que familias con ingresos medios en Houston o Miami, no verían cambio alguno, según ese análisis.
Universos paralelos
Tras la reunión con Trump, el senador republicano por Ohio, Rob Portman, expresó confianza en que el Senado aprobará antes de Navidad el plan de reforma tributaria que, a su juicio, ayudará a la clase media, creará más empleos, y aumentará los salarios para los trabajadores.
“Nuestro código tributario hace tiempo necesitaba una reforma, y es crítico que lo hagamos para ayudar a las familias de clase media”, aseguró Portman.
On @FoxNews, I discussed today's meeting w/ @POTUS and how #taxreform will help the #middleclass: pic.twitter.com/MRIit9nzuL
— Rob Portman (@robportmanOH) November 27, 2017
Según Portman, el plan permitirá que en su estado, una familia con ingresos medios se ahorrará $2,375 en sus impuestos, que pueden utilizar para comprar gasolina o comida, pagar facturas, ahorrar para la universidad de sus hijos, o tomarse unas vacaciones.
Under the Senate #taxreform plan, a median income #Ohio family will save $2,375 annually on their tax bill. We must get this done: https://t.co/MeGO8yEZCy #jobs
— Rob Portman (@robportmanOH) November 27, 2017
Sus palabras, sin embargo, son las de líderes políticos que no viven las viscisitudes del ciudadano de a pie, y tampoco reflejan el escepticismo o rechazo popular al plan en las encuestas.
En ese sentido, Seth Hanlon, un analista económico del Centro para el Progreso Estadounidense (CAP), dijo a este diario que el plan “tendrá un impacto devastador en las ciudades de EEUU”.
“Hará más difícil que las ciudades y comunidades inviertan en su futuro, y aumentará los problemas financieros para las organizaciones caritativas, porque debilita los incentivos para hacer donaciones. Y como el plan no está financiado, eso provocará recortes automáticos al Medicare y otros programas a partir del próximo año”, advirtió Hanlon, exasesor económico de la Administración Obama.
Un análisis del “Tax Policy Center”, un grupo no partidista, indicó recientemente que más de 87 millones de familias de clase media verán un incremento en sus impuestos eventualmente, mientras que el 1% de los más ricos tendrá un recorte promedio de $32,510.
Gran oposición al plan
La oposición al plan, que los republicanos elaboraron sin aporte de los demócratas ni audiencias, ha venido de la mayoría de los demócratas, grupos cívicos, sindicatos, y algunas autoridades estatales en todo el país.
En una carta enviada hoy al líder de la mayoría republicana del Senado, Mitch McConnell, el senador independiente de Vermont y exprecandidato presidencial demócrata, Bernie Sanders, exigió que los republicanos sean “honestos” sobre cómo financiarán su masivo plan de recortes sin afectar los programas sociales para los niños, ancianos, pobres y enfermos.
“Para pagar estos recortes de impuestos para los ricos y las grandes corporaciones, ustedes harán masivos recortes al Seguro Social, Medicare, Medicaid, nutrición, protección ambiental, y todo programa diseñado para proteger las necesidades de la clase media y las familias trabajadoras”, sentenció Sanders.
Por su parte, la coalición “Ni un centavo” (“Not One Penny”), lanzó un nuevo anuncio televisivo como parte de una extensa campaña contra el plan tributario, con el objetivo de “exponer la verdad” sobre la iniciativa que, según advierte, ayuda a los ricos en detrimento del resto de los estadounidenses.
“Pese a sus promesas y garantías, está claro que el plan tributario de Donald Trump fue hecho para quitarle a las familias de clase media para dar masivos recortes a millonarios como él… estamos movilizando a activistas de base y coordinando centenares de eventos para asegurar que se exijan cuentas a todo republicano si vota por este desastroso proyecto de ley”, dijo Nicole Gill, directora ejecutiva de “Tax March”.