Pandillero hispano y sus novias planearon matar a testigo desde la cárcel con teléfono de contrabando
Sus dos parejas lo ayudaron, pero una fuente anónima los delató
Desde la cárcel, Jason García, presunto miembro de alto rango de la pandilla “Bloods” en Westchester (NY), organizó un plan para matar a una madre soltera que fue testigo de un tiroteo por el que sería juzgado.
García está recluido en la cárcel del condado Westchester por supuestamente haber intentado asesinar a dos hombres fuera del “Garden Bar” en Mount Vernon en diciembre de 2016.
El juicio iba a comenzar la próxima semana, pero los fiscales dijeron que probablemente se retrasaría debido a los acontecimientos recientes.
Las autoridades del condado interrumpieron el complot de la pandilla, planeado con un teléfono celular de contrabando, dos novias diferentes de García y un asesino a sueldo para eliminar a una mujer que vio los disparos y fue llamada a declarar.
Los fiscales dijeron que García armó el plan con un teléfono celular pequeño de plástico que contrabandeó dentro de su cuerpo. Y dijeron que su novia Laquanna Kershaw ayudó a llevarle un cargador a la cárcel.
Los investigadores también afirmaron que otra novia, Cassaundra Dunham, rastreó un arma no registrada y se la entregó al también pandillero Damien Rickard, aspirante a balear a la testigo.
La trama se descubrió debido a una denuncia confidencial sobre el teléfono celular. La mujer permanece en custodia protectora en este momento, destacó Pix11.