Espada cree que le hacen ‘brujería’
Continúa el jurado sin llegar a un veredicto
Nueva York.- Con un rosario colgado del cuello estuvo Pedro Espada Jr. en la corte a la espera de que el jurado llegara a un veredicto en el caso que se sigue contra él y su hijo Pedro G. Espada.
Preguntado por la razón del rosario, Espada explicó a EL DIARIO que siempre lo lleva consigo en un bolsillo, pero se lo puso “porque considero que me están haciendo un ‘trabajo’ y cuando me puse el rosario, ella [una agente del FBI de origen dominicano] reaccionó”.
El exsenador se basa en el hecho de que desde hace un tiempo -mientras el jurado está deliberando- parte del equipo de la acusación formado por fiscales, agentes del FBI y del IRS dejan sus asientos y se sientan en los del jurado, siempre en los mismos. Según él, son los de los jurados que ellos creen están a favor de los Espada.
En el noveno día el jurado no logró llegar a un veredicto y siguió solicitando documentos como cuentas bancarias de Community Expansion Development Corporation (CEDC) la compañía creada por los Espada y que estaba encargada de la limpieza de sus clínicas de salud Soundview. Asimismo, contratos entre CEDC y Soundview Management Enterprise (SME) la empresa que administraba Soundview.
Hubo un momento en que pareció habría un veredicto parcial. Tanto así que la oficina de prensa de la fiscalía envió un correo indicando a las 12:52 p.m.: Espada: viene veredicto parcial. La confusión se debió a una nota escrita por el jurado a las 12:40 en la que decían:
“Con cargos que constan de dos partes, si tenemos un acuerdo [unánime] en una parte, pero no en otra ¿se consideraría un veredicto válido?. Queremos decir si encontramos a un acusado culpable/no culpable y no podemos llegar a una decisión sobre el otro”. El juez les respondió que sí y volvieron a la sala de deliberaciones.
Hoy continuarán esas deliberaciones en la corte federal de Brooklyn mientras, en la de El Bronx, los abogados de Soundview pedirán al juez ordene al Departamento de Salud estatal (DOH) que pague a la clínica más de $310,000 que les deben desde mayo 2011. Soundview ha tenido que despedir empleados y cerrar dos de sus clínicas por no haber recibido el pago de servicios prestados a Medicare. Unos 20,000 pacientes son afectados y ésta no es la primera vez que Soundview ha ido a la corte para denunciar la actuación del DOH.