Administración Trump crea oficina especial para quitar la ciudadanía
El Departamento de Justicia se enfocará en distintos casos, incluidos fraudes migratorios
A través del Departamento de Justicia (DOJ), la administración del presidente Donald Trump, buscará retirar la naturalización de inmigrantes que hayan cometido algún delito, como criminales de guerra, terroristas, delincuentes sexuales y “otros estafadores”, indicó esa dependencia en un comunicado.
Será la Sección de Desnaturalización de la División Civil la que investigará y litigará la desnaturalización y se sumará a las secciones existentes dentro de la Oficina de Litigios de Inmigración de la División Civil: la Sección del Tribunal de Distrito y la Sección de Apelaciones.
“Esta medida subraya el compromiso del Departamento de llevar justicia a los terroristas, criminales de guerra, delincuentes sexuales y otros estafadores que obtuvieron ilegalmente la naturalización”, indicó el DOJ.
Destaca que la Oficina de Litigios de Inmigración ha logrado éxito en 95 por ciento de los casos de retiro de naturalización, hay un creciente número de expendientes a atender, por lo que fue necesario crear la división especial.
“Cuando un terrorista o delincuente sexual se convierte en ciudadano estadounidense bajo falsas pretensiones, es una afrenta a nuestro sistema, y es especialmente ofensivo para quienes son víctimas de estos delincuentes”, dijo el fiscal general adjunto Jody Hunt. “La Sección de Desnaturalización promoverá los esfuerzos del Departamento para perseguir a aquellos que obtuvieron ilegalmente el estatus de ciudadanía y garantizará que sean responsables de su conducta fraudulenta”.
Los fiscales se enfocarán en casos de criminales naturalizados, pero también atenderán aquellos inmigrantes que obtuvieron la ciudadanía mintiendo sobre su pasado o sus condiciones de arribo al país.
Entre los ejemplos que el DOJ menciona para la justificación de la nueva oficina está el caso U.S. v. Warsame, un grupo de cuatro personas que afirmó ser una familia en Minnesota.
“(Fueron las) desnaturalizaciones civiles exitosas de cuatro personas que afirmaron fraudulentamente ser una familia para obtener la admisión a los Estados Unidos a través del Programa de Visas de Diversidad para Inmigrantes”, indicó.
En otro caso, U.S. v. Mondino, persiguió a un hombre condenado por conspirar para defraudar al Banco de Exportaciones e Importaciones de EEUU, lo que derivó en pérdidas por más de $24 millones de dólares. El hombre se autodeportó.
El DOJ destaca otros casos sobre terrorismo e inmigrantes que cometieron abusos sexuales contra menores, así como violadores de derechos humanos.
Uno de los casos es U.S. v. Hamed sobre un hombre que violó las restricciones comerciales con Irak, pero transfirió ilegalmente un millón de dólares, utilizando organizaciones sin fines de lucro.
Desde el 2017, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) busca reducir los fraudes migratorios a través de diversos programas en coordinación con la oficina de Servicios de Inmigración y Ciudadanía (USCIS) y la agencia Inmigración y Control de Aduanas (ICE).
Estos esfuerzos empatan con el plan de 2019, para endurecer la investigación de los inmigrantes que aplican por la Residencia Permanente y la ciudadanía.
“USCIS se esfuerza por detectar y disuadir el fraude migratorio, utilizando una variedad de procesos de investigación y selección para confirmar la identidad y elegibilidad del solicitante”, expuso la agencia en octubre pasado. “También realiza visitas al sitio, entrevista a los solicitantes y solicita evidencia de los beneficios que ofrecen el estatus de las personas”.