¿Tus pequeños dicen “gracias”? Según la neurociencia, serán muy felices
Expertos recomiendan fomentar este acto, es decir que primero lo hagan los padres y así lo repliquen sus hijos
No hay cosa más bella en un niño pequeño que tener modales, agradecer por lo que se le da, así que si tu hijo es de los que suele decir “gracias” entonces en su etapa adulta será muy feliz.
Así lo asegura un estudio realizado por psicólogos en California y Miami, y que comprobaron que la gratitud de una persona en su infancia le dará felicidad en su futuro, además de que le ayudará en su salud física.
Esta afirmación ha sido comprobada en la investigación realizada por el Dr. Robert Emmons de la Universidad de California en Davis, y por el Dr. Michael McCullough de la Universidad de Miami.
Durante la investigación de 10 semanas, dividieron en tres grupos a las personas que participaron. El primer grupo debía llevar un diario de las cosas que les había sucedido esa semana, por las que estuvieron agradecidos. El segundo grupo anotaría los eventos diarios que los molestaran. Mientras que el último grupo debería escribir que los eventos que no les despertaran emoción alguna.
El resultado de esta investigación que demostró que ser agradecido te da felicidad, y concluyó esto porque el grupo 1 informó sentirse más optimista en general, además que descubrieron que las visitas al médico disminuyeron, en comparación con los grupos 2 y 3.
Durante la investigación se midió la actividad cerebral mediante imágenes de resonancia magnética, donde los sujetos que fueron inducidos a dar gracias por recibir un regalo, mostraron una mayor actividad en zonas relacionadas con la cognición moral y social. Lo que los llevó a concluir que la gratitud fomenta una actitud positiva y de apoyo a otros.
Además se notó una activación en el hipotálamo con efectos en el metabolismo y el estrés. Siendo así que se observó que dar gracias causa un desprendimiento de dopamina, la hormona del placer.
Está más que comprobado que ser agradecido te da felicidad y además mejora la salud; por lo que se recomienda fomentar este acto, empezando por los padres y compartirlo con sus hijos. Incluso puedes empezar un diario, como lo hicieron los investigadores, donde escribas lo que agradeces de verdad y con ello recordar por qué eres feliz.