La OMS y médicos lanzan alertas sobre el “tratamiento revolucionario” impulsado por Trump contra coronavirus
Especialistas reconocidos indican que la terapia con plasma "sigue en investigación"
La Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoció que recibió una petición de uso de emergencia de la terapia con plasma en casos de coronavirus por parte de la Administración del presidente Donald Trump, pero advirtió que no está probada y que existe “muy poca evidencia” de que sea segura y eficaz.
El Dr. Soumya Swaminathan, científico jefe de la organización, dijo que si bien hay ensayos clínicos que buscan evaluar el uso de plasma sanguíneo de pacientes de la enfermedad mortal que se han recuperado, solamente unos pocos han informado resultados.
“Los resultados no son concluyentes… Los ensayos han sido relativamente pequeños y los resultados en algunos casos apuntan a algún beneficio, pero no han sido concluyentes”, expresó.
Otros expertos en Estados Unidos se sumaron a la postura, como la Sociedad Americana de Bioquímica y Biología Molecular, criticó al Departamento de Alimentos y Medicamentos (FDA) por acelerar la aprobación de dicho protocolo y acusó al mandatario republicano de querer utilizarlo para su agenda política.
“El presidente Trump una vez más está anteponiendo sus objetivos políticos a la salud y el bienestar del público estadounidense”, dijo la ASBMB en un comunicado.
El plasma, extraído de pacientes que se han recuperado de Covid-19 y han desarrollado anticuerpos contra el virus, se infunde en pacientes enfermos.
Un estudio de 35,000 pacientes publicado a principios de este mes por la Clínica Mayo y patrocinado por los Institutos Nacionales de Salud sugirió que el plasma podría reducir la mortalidad en algunos pacientes graves, pero no hay conclusiones contundentes.
La FDA dijo el domingo que estaba otorgando el uso del tratamiento como emergencia, permitiendo a los proveedores de atención médica en los EE. UU. tratar el Covid-19 en pacientes hospitalizados.
“Esta es una terapia poderosa que transfunde anticuerpos muy, muy fuertes de la sangre de pacientes recuperados para ayudar a los pacientes que luchan contra una infección”, defendió el presidente, quien anunció el uso del protocolo junto con el comisionado de la FDA, Stephen Hahn.
Analistas políticos indican que la decisión del presidente Trump de acelerar el uso de ese tratamiento tiene un nexo con las calificaciones negativas sobre cómo ha enfrentado la pandemia, lo que podría afectar su reelección el 3 de noviembre.