Infórmate acerca de la vacuna contra el COVID-19
2021 empieza con la expectativa y la esperanza de que la vacuna contra el Covid-19 nos devuelva la tranquilidad. Conoce más sobre la vacuna para tomar una decisión acertada.
Actualmente más de 85 millones de personas han contraído el virus del Covid-19 a nivel mundial y 1 millón 850 mil personas han muerto como consecuencia. En Estados Unidos, el número de personas que se han infectados llega a casi 21 millones y las muertes se acercan peligrosamente a las 400 mil. Somos el país con las cuentas más elevadas en todo el mundo.
Hemos visto en los medios a líderes como el presidente electo Joe Biden recibiendo su primera dosis de la vacuna contra el Covid-19. Si bien es cierto que va a tomar varios meses el poder distribuir y aplicar las vacunas a todos los que las necesitan, es importante que estés informado acerca de ellas. Actualmente contamos con dos vacunas que se han aprobado para su uso por la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA) y por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) y sus Comités Asesores: La fabricada por Pfizer y la fabricada por Moderna.
¿Qué son las vacunas antivirales?
Como el nombre lo dice, las vacunas antivirales se producen para combatir a un virus, con la idea de evitar la enfermedad. Algunas vacunas antivirales contienen una forma inofensiva del virus que causa la enfermedad contra la que se quiere causar inmunidad. Antes de usarse en la vacuna, los virus se matan, se debilitan o se dividen en partes pequeñas para que se pueda desencadenar una respuesta inmunológica sin enfermar a la persona. De esta forma, si la persona se ve expuesta a este virus otra vez, su sistema inmunológico (de defensa) lo reconocerá y ya tendrá las armas para combatirlo.
Hay otras vacunas que funcionan a través del RNA mensajero (mRNA). Estas contienen una tira de material genético en una burbuja de grasa. Una vez dentro de la célula, el RNA genera una proteína que se encuentra en la superficie del virus. Cuando el sistema de defensa se encuentra con la proteína, cree que se trata del virus y desencadena la reacción para crear anticuerpos en contra de él. Estas vacunas se pueden producir mucho más rápidamente. Tanto la vacuna de Pfizer como la de Moderna funcionan a través del mRNA.
Existen otras tecnologías para producir vacunas y varias están en fase de desarrollo y de aprobación.
Desarrollo de las vacunas
Se estima que están en desarrollo más de 130 vacunas potenciales contra el COVID-19 a nivel mundial. Varias de ellas ya están en etapas de ensayos clínicos avanzadas. Esto significa que se están realizando los estudios necesarios para determinar su eficacia y su seguridad en humanos. Si se comprueba que completan los requisitos necesarios por la FDA y los CDC, se aprobará su administración fuera de los ensayos clínicos también.
Actualmente, la mayor parte de los ensayos clínicos han superado ya la fase I y II en las que se evalúa la seguridad de las vacunas. La fase III está en sus fases iniciales y en ella miles de adultos voluntarios sanos se eligen de forma aleatoria a recibir, ya sea, la vacuna del COVID-19 o un control, que puede ser un placebo. Ni el investigador ni el voluntario saben qué recibieron (esto se conoce como doble ciego). Así que ambos grupos se comportan igual en cuanto a los riesgos que están tomando. Además, se evalúan efectos secundarios en ambos grupos.
Se sigue a los participantes regularmente para preguntarles acerca de sus síntomas y se les hacen exámenes para descartar infección. La meta es comparar la tasa de infección (enfermedad) en ambos grupos para ver cómo funciona la vacuna contra el COVID-19. Lo ideal es que la tasa de enfermedad sea 70% más baja en las personas vacunadas comparado con las no vacunadas. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la vacuna tiene que ser mínimo 50% efectiva, cuando se promedia en todos los grupos de edad.
Es necesario inscribir un número elevado de personas e incluir a personas que estén en áreas de alto riesgo de exposición a la infección. Típicamente toma de 3 a 6 meses, pero puede ser más. Hay países como Rusia que decidieron aprobar sus vacunas y empezar a darlas sin completar los pasos necesarios para determinar si son seguras y/o efectivas (o sea, la fase 3).
Aunque hay un progreso importante, la meta en Estados Unidos es proporcionar vacunas seguras y efectivas a millones de sus ciudadanos lo antes posible.
Dudas sobre ponerse o no la vacuna
La idea de desarrollar una vacuna a “la velocidad de la luz”, como se ha denominado el proyecto en Estados Unidos, ha causado titubeo en una parte de la población.
En una encuesta realizada por el Pew Research Center a mediados de noviembre, el 60 por ciento de los estadounidenses dijeron que se pondrían la vacuna contra el Covid-19. Mientras esto representaba un aumento sobre unas encuestas realizadas por Gallup en septiembre y en octubre, en las que sólo el 50 por ciento de los estadounidenses dijeron que se la pondrían, todavía es un porcentaje menor al 70 a 90% de la población que los expertos recomiendan deben inmunizarse para que se pueda disminuir la diseminación del virus en una forma significativa. Y el titubeo o resistencia a ponerse la vacuna tiende a ser mayor entre los hispanos y los afroamericanos que, curiosamente, han sido los más afectados tanto en infecciones y hospitalizaciones, así como en muertes.
La OMS considera ese titubeo para ponerse la vacuna como una amenaza a la salud a nivel global, ya que si poca gente se la pusiera, pondría en peligro el impacto positivo de la vacuna.
Aún queda camino por recorrer. El primer paso es siempre informarse y, como dice Amesh Adalja, un experto de la Johns Hopkins University, “en este momento sólo necesitamos algo que mitigue el daño que causa el virus, quizá la primera vacuna no prevenga la infección totalmente, pero si previene la hospitalización, o si previene la muerte….eso ya sería enorme”.
Cuando tengas la oportunidad de vacunarte, póntela. Y recuerda que tendrás que seguir usando máscara, manteniendo el distanciamiento social, lavándote las manos, etc. después de que te pongan la vacuna: Primero, porque se necesita tiempo para que formes anticuerpos; segundo, porque necesitas dos vacunas para que logres buena eficacia, tercero, porque todavía no sabemos si podrías contagiar a otro si la persona no está vacunada, y cuarto, porque hasta que no haya inmunidad de grupo, en que el 70 al 90% de la población se haya vacunado, no habremos controlado la pandemia. Protégete y protege a los demás.
-Aliza A. Lifshitz, conocida por su amplia trayectoria en los medios hispanos como la Dra. Aliza, es la experta de salud de la cadena de televisión educativa para la comunidad hispana HITN. En HITN es anfitriona del bloque diario de programación Vida y Salud, un espacio en el que comparte información y herramientas a los hispanos para llevar vidas más saludables y comunicarse mejor con sus doctores.