Pases Cortos
El gobierno brasileño divulgó ayer el Plan Estratégico de Seguridad para el Mundial de futbol que el país organizará en 2014 y que considera a los hinchas violentos, tanto locales como extranjeros, como uno de los factores de riesgo a ser neutralizado.
El plan, elaborado por la Secretaría Extraordinaria de Seguridad para los Grandes Eventos, incluye todas las acciones que serán implementadas para garantizar la seguridad de la competición de la FIFA.
El documento detalla las medidas para combatir a los espectadores violentos y las medidas que se adoptarán para neutralizarlos.
Para tal efecto, Brasil contará con la colaboración de autoridades de varios países europeos y también de naciones sudamericanas.
El zaguero peruano Christian Ramos y el delantero Iván Bulos jugarán en el Nacional de Portugal y el Standard Lieja de Bélgica, respectivamente.
Ramos, que militaba en el Universidad San Martín, viajó ayer a Portugal para firmar un contrato con su nuevo equipo y volverá de inmediato a Lima para unirse a la convocatoria de la selección de Perú que disputa las eliminatorias al Mundial de Brasil 2014.
Bulos, por su parte, confirmó en Twitter que firmó un contrato tres años para prestar sus servicios al Standard de Lieja.
El exseleccionado ecuatoriano de futbol Jaime Iván Kaviedes deberá permanecer cinco días en prisión por un supuesto escándalo en la vía pública y agresión a dos elementos policiacos.
Según informes de la policía de Quito, Kaviedes causó un escándalo la noche del miércoles en la vía pública y agredió a dos policías en las afueras de una tienda de licores.
Un grupo de seguidores de Maradona expresó su malestar y reclama el dinero de las entradas de un evento del exfutbolista argentino en Australia cancelado desde el pasado enero.
Los organizadores retrasaron hasta mayo y luego indefinidamente el acto, una entrevista con la estrella argentina del balompié, para el que se habían pagado entradas con un precio que oscila entre los 71 y 1,800 dólares.
Un tribunal penal de San José sentenció ayer una condena de 12 años de cárcel por lavado de dinero a Carlos Pascall, expresidente y máximo accionista del Limón FC de la primera división del futbol de Costa Rica.
El tribunal también ordenó el decomiso de 15 propiedades de Pascall, además de vehículos, motocicletas, embarcaciones, cuentas bancarias y fondos de inversión.
El juez Ricardo Barahona argumentó en la audiencia que existe la convicción absoluta de que Pascall es culpable del delito.
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