El mundo se olvida de Trump; mejora imagen de EE.UU. con Biden
Un estudio mostró un drástico cambio en la percepción mundial del país. Durante la administración del republicano pocos confiaban en que haría lo correcto
La confianza que despierta Estados Unidos en el extranjero ha mejorado drásticamente con la llegada de Joe Biden a la Casa Blanca, según una encuesta publicada este jueves por el Centro de Investigaciones Pew.
En los 12 países analizados, una media del 75 % de encuestados aseguró que siente confianza en Biden para “hacer lo correcto en asuntos internacionales”, comparado con el 17 % que dio esa misma respuesta el año pasado, aún bajo el mandato de Donald Trump (2017-2021).
“La elección de Joe Biden como presidente ha provocado un cambio dramático en la imagen internacional de Estados Unidos”, asegura el informe, publicado la misma semana en la que Biden realiza su primera visita a Europa, donde entre otras actividades se ha reunido con líderes de la OTAN.
Según el registro de Pew, la confianza que el resto del mundo deposita en EE.UU. cayó a mínimos históricos durante la presidencia de Trump: Solo el 34 % de los participantes dijo entonces que tenía una imagen positiva del país frente al 62 % en la actualidad.
El estudio ha reunido las respuestas de más de 16.000 personas de 12 países: Reino Unido, Alemania, Francia, Italia, España, Suecia, Países Bajos, Grecia, Canadá, Japón, Corea del Sur y Australia. Todos ellos aliados estratégicos de Estados Unidos.
En algunos, como Suecia y Alemania, la diferencia entre la confianza generada por Trump y Biden alcanza los 70 puntos, mientras que en Japón y Corea del Sur roza el 50 %.
El 90 % de todos los encuestados calificó a Trump de arrogante al comienzo de su mandato, un adjetivo que solo el 13 % utilizó para describir a Biden quien, a su vez, está considerado con mejores cualidades para el cargo (77 %) que su antecesor (16 %).
Tradicionalmente, los países de Europa Occidental (Alemania, Francia, España y Reino Unido, según la clasificación de Pew) muestran una inclinación más favorable a los mandatarios demócratas, ya que la confianza también registró máximos con Barack Obama (2009-2017) y llegó a mínimos durante el final de la presidencia de George W. Bush (2001-2009) en plena Guerra de Irak.