Cuáles han sido los virus más letales de la historia
Hasta el momento, el COVID-19 ha cobrado la vida de poco más de 4 millones de personas en el mundo. Sin embargo, otros virus más mortales han azotado a la humanidad a través de los años
Una característica de la pandemia que vivimos es la rapidez con que podemos acceder a la información: las estadísticas de infecciones y decesos están disponibles en tiempo real. Esa posibilidad no existía hace cientos de años, lo que dificulta calcular con exactitud las muertes que otras epidemias dejaron tras de sí. Sin embargo es posible saber cuáles han sido los virus más letales de la historia, más allá del COVID.
Viruela
El virus Variola major, de la familia de los Poxviridae, causó muertes en todo el mundo. En Europa causaba unos 400,000 muertos cada año a finales del siglo XVIII. Algunas teorías sostienen que este virus pudo causar la desaparición de las civilizaciones inca y azteca. Su letalidad llegó al 90% y fue erradicado hasta 1979, luego de una intensa campaña de vacunación global. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos considera a la viruela como un agente de categoría A, es decir, como una amenaza máxima para la salud pública.
Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA-VIH)
A pesar de los grandes esfuerzos de la ciencia para vencer a este virus que apareció por primera vez en 1981, el VIH ha causado 39 millones de muertes hasta 2013. Según cifras de ONUSIDA, cada minuto se infectan nueve personas en el mundo. Y aunque ya existen tratamientos farmacológicos que retrasan la muerte, la forma en que se comporta el virus y se adapta a cada persona que se infecta, lo mantiene como una enfermedad incurable para la que no existe una vacuna.
Influenza
La llamada gripe española causó una pandemia que en 1918 mató a entre 20 y 50 millones de personas en el mundo. Este tipo de virus respiratorios infecciosos mutan con facilidad al contagiarse de persona a persona o al adquirirse a través del consumo de carne animal contaminada. En 2009 la gripe aviar AH1N1 causó una pandemia que se controló rápidamente. Cada año, la influenza mata a entre 250,000 y 500,000 personas al año. Afortunadamente hay vacunas.
Hepatitis B y hepatitis C
Según datos de la OMS, unas 240 millones de personas sufren hepatitis B -muchos de ellos sin saberlo-, y entre 130 y 150 millones de personas padecen hepatitis C en el mundo. Ambas infecciones, aunque causadas por virus distintos, provocan una infección crónica en el hígado que puede desencadenar cirrosis o cáncer. Ambos se transmiten por contacto sexual o por transfusiones sanguíneas. Para la hepatitis B existe una vacuna con 95% de efectividad, pero no hay vacuna para la hepatitis C.
Dengue
La OMS calcula que cada año se infectan entre 50 y 100 millones de personas. Factores como el calentamiento global han ayudado a que los mosquitos que transmiten este virus se dispersen más fácilmente por otros lugares del planeta. Sus síntomas se parecen a los de al gripe y en un 1% de los casos puede causar complicaciones letales. El dengue severo es una de las principales causas de hospitalización y muerte en niños de Asia y América Latina.