Desamparado víctima de policía abusador en Atlanta recibirá $100 millones; quedó paralizado del cuello hacia abajo
Un jurado federal en Atlanta determinó que el agente Jon Grubbs se excedió en el uso de fuerza contra Jerry Blasingame, tras perseguirlo y someterlo con la pistola paralizante antes de que se rompiera el cuello
Un desamparado que quedó paralizado del cuello hacia abajo luego de que un policía lo impactara con una pistola taser recibirá $110 millones de dólares en Atlanta.
Un jurado federal en Atlanta determinó que el agente Jon Grubbs se excedió en el uso de fuerza contra Jerry Blasingame, tras perseguirlo y someterlo con la pistola paralizante antes de que se rompiera el cuello, informaron medios nacionales esta semana.
El día de los hechos, 10 de julio de 2018, Blasingame, que en ese momento tenía 65 años, estaba pidiendo dinero a conductores.
Los miembros del jurado decidieron que el Departamento de Policía de Atlanta debe pagarle al ciudadano $60 millones y Grubbs $40 millones. Las facturas por servicios médicos al paciente superan los $14 millones.
Sin embargo, la Ciudad presentó una moción para un veredicto dirigido que podría enmendar el fallo del jurado.
El juez Steve Jones no ha emitido una resolución sobre esa solicitud. Jones determinó, antes de que empezaran las deliberaciones, que los miembros del panel podrían razonablemente considerar que Grubbs utilizó fuerza excesiva, así como el argumento de la Ciudad.
“El récord le permitirá al jurado considerar que el Sr. Blasingame no estaba cometiendo ningún crimen serio antes de que fuera atacado con la pistola paralizante/ que el oficial Grubbs no temía por su seguridad/ y que las circunstancias apremiantes no eran tan severas para permitirle a Grubb el uso de fuerza”, escribió Jones el viernes.
El Atlanta Journal-Constitution reseñó que los abogados del demandante, Ven Johnson y Craig Jones, plantearon que Grubbs violó la política del departamento por utilizar una pistola eléctrica en un anciano que huía.
Según la demanda que cita el referido medio, Blasingame se encontraba en la calle pidiendo dinero a desconocidos cuando Grubbs y otro oficial lo vieron hablando con un conductor.
Grubbs se bajó de la patrulla y le dijo a Blasingame que parara, pero él se movió fuera de la calle a una barandilla, y el oficial corrió hacia él.
“Grubbs se bajó del auto y empezó a perseguir a mi cliente, un hombre de 65 años. ¿Y para qué? Por potencialmente pedirle dinero a la gente”, agregó.
El abogado además planteó que la Ciudad no hizo una investigación exhaustiva del proceder del oficial y le permitió regresar a laborar a tiempo completo seis meses después del incidente y antes de que la pesquisa culminara.
Staci J. Miller, una de las abogadas que representa a Atlanta y a Grubbs, planteó que las heridas de Blasingame fueron trágicas, pero que no se puede culpar al entrenamiento de la Ciudad a policías y la política del departamento.