Servicios de salud mental para nuestra comunidad

Hace algo menos de dos años, la Encuesta nacional sobre el consumo de drogas y la salud reveló que algo más de uno de cada cinco adultos latinos tenían algún desorden mental, emocional o de comportamiento que afectaba sus vidas. Esa proporción es levemente inferior a la de los blancos no hispanos y algo superior a las de los afroamericanos no hispanos y los americanos de origen asiático. 

 “Pero detrás de esas similitudes” afirma María Lugo, Directora Superior de Iniciativas de la Salud de nuestra Hispanic Federation, “se oculta un problema bastante más grave, porque la encuesta de 2022 también dejó al descubierto que la proporción de las y los adultos latinos que reciben tratamiento es baja”.

“Desafortunadamente, de todos esos millones de hispanas e hispanos afectados, solamente el 34% ha recibido tratamiento”, amplía Nayla Lehrfeld, Supervisora Principal de la Clínica de Salud Mental del Programa del Instituto de la Familia Puertorriqueña, que forma parte de nuestra Hispanic Federation.

Eso se debe a motivos muy diversos. Por ejemplo, a que en muchas familias de nuestra comunidad se da prioridad al trabajo, al cuidado de los niños o el hogar por encima de la salud emocional de los adultos, o a que estos carecen de seguro de salud o de recursos para pagar las consultas. 

 “Pero hay otros obstáculos”, añade María Lugo, “como el bajo número de profesionales de la salud mental que son latinos, conocen nuestra cultura o hablan nuestro idioma”.

 Los datos de la American Psychological Association confirman el juicio de nuestra Directora de Iniciativas de Salud, porque indican que a nivel nacional solamente un 8% de los psicólogos se identifica como latino. De esos profesionales, el 75% son mujeres y el 25% restante, hombres.

 Desde la fundación de la Hispanic Federation, hace más de tres décadas, una de sus características más destacadas, al igual que de sus muchas organizaciones miembros, ha sido el hincapié que hacemos en que los servicios que prestamos a nuestra comunidad sean culturalmente apropiados. Entre otras razones, porque se ha demostrado una y otra vez que nuestra gente busca y acepta mejor la ayuda si se la ofrece alguien que entiende y comparte sus experiencias y su idioma. Y esto es especialmente cierto cuando se trata de ayuda con las delicadas cuestiones de la salud mental.

Aunque no puedo enumerar aquí todas las agencia de la Hispanic Federation que ofrecen asistencia y servicios de salud mental, no quiero terminar con este tema sin mencionar algunos ejemplos.

Una de esas organizaciones es COPAY (Community Organization for Parents and Youth, en Great Neck, Long Island, (516) 466-2509.

También en Long Island ofrece ese tipo de servicios Hispanic Counseling Center, (516) 538-2613, www.hispaniccounseling.org.

En Manhattan, funciona el mencionado Instituto de la Familia Puertorriqueña, (212) 229-6942, www.prfiorg.com.

 En Jackson Heights, Queens, está la sede de Voces Latinas, (718) 593-4528, voceslatinas.org, que ofrece ayuda en materia de salud emocional.

Y en Manhattan están las oficinas centrales de Comunilife, (212) 219-1618, www.comunilife.org.

 Por supuesto, en caso de emergencia o crisis emocional, llamen de inmediato a la línea de ayuda 988.

 Si visitan nuestro sitio Web, o nos llaman al (866) HF AYUDA o al (866) 432-9832, podremos referirlos a otras agencias de nuestra Hispanic Federation que ofrezcan esos servicios.

¡Celebren con nosotros el 34to aniversario de la Hispanic Federation, y hasta la próxima columna!

Frankie Miranda es el presidente de la Hispanic Federation