Pediatra pagará millones por muerte de niña en Queens
Claudialee Gómez Nicanor, de 6 años, falleció tras ser diagnosticada y tratada erróneamente
Nueva York — Una pediatra de Queens fue condenada a pagar más de $8 millones por un diagnóstico errado, que causó la muerte de una niña hispana de 6 años, informaron los abogados de la familia de la víctima.
La doctora Arlene B. Mercado fue la responsable del fallecimiento de la pequeña Claudialee Gómez Nicanor, ocurrida el 24 de enero de 2010.
Según se demostró en el juicio, la pediatra insistió en tratar a la niña por una diabetes del tipo dos, cuando es una condición que casi nunca se presenta en menores de su edad, de acuerdo con lo demostrado por el abogado de la familia, Gary B. Pillersdorf, basándose en opiniones de expertos médicos.
Gómez Nicanor padecía una diabetes del tipo uno que, al no ser tratada adecuadamente, causó una cetoacidosis diabética, que llevó a la menor a la muerte.
Según el Servicio de la Biblioteca Nacional de Medicina, esta enfermedad se da cuando el cuerpo no puede usar el azúcar (glucosa) como fuente de energía y por la ausencia o escasez de insulina. En cambio, el organismo utiliza la grasa para obtener energía.
Henar Nicanor, madre de Claudialee, expresó alivio por la sentencia. “Me da un pequeño consuelo que la hayan encontrado culpable”, dijo. Pero, “lo que yo quiero es que este caso alerte a las madres sobre los doctores que eligen para sus hijos y que ninguna tenga que vivir lo que yo he pasado”.
Durante el juicio, se demostró que Mercado destruyó los expedientes originales de la niña y falsificó el cuadro médico. Esto lo hizo en un intento para fingir que la madre de la pequeña no acudió a una cita médica que podía haber salvado la vida de su hija.
El jurado determinó que la doctora —que utilizaba el sótano de la casa de su hermana como consultorio— empleaba a sus sobrinos sin formación médica, para medir, pesar y tomar la presión arterial y los vitales de la paciente.
La propia galeno testificó que, aunque trataba a niños con diabetes, no tenía un medidor de glucosa en la sangre ni tiras para analizar orina en su oficina.
El doctor Craig Altyer, director de Pediatría en el Hospital Infantil de Filadelfia, explicó que, con la condición de Gómez Nicanor, el nivel de azúcar debió verificarse al menos tres veces a la semana.
“En 45 años de profesión, he demandado a muchos médicos, pero nunca me he sentido tan enfadado ni ofendido como en este caso”, dijo Pillersdof. “Esa doctora no tiene escrúpulos y nunca se preocupó por la salud de la niña”.
Mercado, quien no quiso declarar sobre el caso, recibió adiestramiento médico en Filipinas, pero no estaba certificada en las juntas oficiales de pediatría y endocrinología, aunque esto no es un requisito para ejercer en Nueva York.
Mercado deberá pagar $400,000 por el sufrimiento que padeció Gómez Nicanor, $100,000 por muerte por negligencia y $7.5 millones por destruir expedientes y falsificar el cuadro médico. Sus abogados aún pueden apelar la sentencia.
La niña era una estudiante de primer grado en la escuela pública 32 de Queens, la que tiene ahora un programa de orientación sobre la diabetes en su honor.