Obama condenó el ataque en Charleston e insistió en el control de armas
Con un semblante serio, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, condenó el tiroteo del que fue víctima una iglesia afroamericana de Charleston, en el que murieron nueve personas. Al mismo tiempo lamentó que en otras ocasiones haya tenido que dar este tipo de discurso debido a los inumerables casos de violencia que han ocurrido en el país porque no existe un control de armas.
“Una vez más, personas inocentes perdieron la vida por alguien que quería hacer daño y no tuvo obstáculos para obtener un arma“, dijo Obama en una conferencia de prensa.
Después, hizo un llamado para que este tipo de hechos violentos paren: “Nosotros sí podemos hacer algo al respecto, lo digo reconociendo la política en Washington, sería incorrecto no reconocer cuál es el problema y en algún momento va a ser importante que Estados Unidos asuma el problema de poder cambiar la forma en cómo pensamos acerca de la violencia con armas de fuego”.
Fue así como Obama se pronunció sobre el más reciente episodio, que las mismas autoridades han llamado un crimen de odio.
La noche del miércoles, un joven blanco abrió fuego durante una plegaria en una iglesia de la comunidad afroamericana en el centro de Charleston. Tras un intenso operativo de búsqueda, la policía capturó al sospechoso, identificado como Dylann Storm Roof, en Shelby, Carolina del Norte.
Estos hechos han causado indignación a nivel nacional e internacional.
“Es la primera vez que una iglesia afroamericana ha sido atacada. El odio racial es una amenaza a la democracia”, indicó en el discurso.
Hubo un momento en el que aprovechó para recordar la lucha de Martin Luther King, hace más de 50 años cuando fueron asesinadas cuatro niñas en Alabama.