Revolucionando marihuana
La sesión especial de las Naciones Unidas, la UNGASS, coincidentemente se celebra en la ciudad de Nueva York, la capital mundial de arrestos para posesión de marihuana. Aun con la descriminalización de posesión personal, miles de personas, desproporcionalmente jóvenes y latinos, son arrestados diariamente. El debate global sobre drogas en la UNGASS enaltece estos temas locales pero en el país entero igual que en el hemisferio hay una revolución marihuanera.
Latinos en particular tienen que movilizarse dados los hechos históricos y los efectos dañinos de políticas prohibicionistas en su comunidad.
Es curioso como los Estados Unidos cambió el léxico de la palabra cannabis a la palabra “marijuana”. Todo tuvo que ver con la criminalización de comportamientos de personas inaceptables según los estereotipos y la discriminación de esa era, en particular contra los inmigrantes mejicanos. Al principio del siglo vente cannabis era parte de los ingredientes medicinales para insomnio y dolores de cabeza. Pero después de la Revolución Mejicana en 1910 miles de mejicanos llegaron a este país y la respuesta gubernamental era marginalizarlos y controlarlos con delitos nuevos y la encarcelación. Como la palabra mariguana era común en Méjico las nuevas leyes penales adoptaron el léxico empezando con El Paso, Texas.
Pero la asociación convenientemente racista entre la hierba y los mejicanos no paro ahí. El líder de la oficina federal de narcóticos, Harry Anslinger estuvo obsesionando con la eliminación de marihuana. Para él fue más fácil convencer el congreso de los “peligros” de marihuana si pudo conjurar imágenes alarmantes. La palabra “marijuana” significaba algo extraño, invasor y mejicano en vez que la palabra cannabis utilizada en el mundo entero. “Marijuana causa más violencia que cualquier otra droga” testificó Anslinger. “La mayoría de los fumadores son negros, hispanos, filipinos y músicos” concluyó.
Hoy día esa posición es absurda. Pero en 1937 el temor y la xenofobia ganó y el Congreso puso marihuana en la misma categoría de drogas ilícitas como heroína y cocaína y con el mismo nivel de penalidades.
Ahora 23 estados legalizan el uso medicinal de marihuana. Otros cuatro lo han legalizado completamente. La industria de marihuana legal en este país alcanza $5,400 millones sin ningún problema serio en la salud pública. Y en Sudamérica Uruguay descriminalizó la hierba y tomó control sobre su producción.
Al contrario, la legalización de marihuana fácilmente cambiaría la guerra contra las drogas. Nuestro colega en California, Antonio González, señala que legalización representa la eliminación de la mitad de ganancias de los carteles y por ende, su poder. Por esta razón, entre tantas otras, votantes Latinos en California deben de apoyar la legalización de marihuana. Y para enfrenar el abuso de arrestos innecesarios, latinos en Nueva York deben alinearse.
-Juan Cartagena es el presidente de LatinoJustice PRLDEF