Centroamérica ante el reto de combatir la violencia

Los gobiernos centroamericanos deben seguir lidiando en 2012 con la violencia regional.

Jóvenes hondureños marchan por las calles de Tegucigalpa para protestar contra la violencia.

Jóvenes hondureños marchan por las calles de Tegucigalpa para protestar contra la violencia. Crédito: EFE / Archivo

Guatemala – Los gobiernos centroamericanos deben seguir lidiando en 2012 con la violencia regional.

Además, los cambios o la continuidad política, por procesos electorales en Guatemala y Nicaragua, ofrecerán contrastes que podrían generar cambios en la dinámica diplomática entre las naciones centroamericanas en 2012.

Las elecciones estaban pautadas para una fecha apocalíptica: 11 de septiembre del 2011. Pero los sismos políticos comenzaron antes que iniciara el año. El empeño de la primera dama Sandra Torres de participar como candidata presidencial del partido oficial (Unidad Nacional de la Esperanza, aliada con la Gran Alianza Nacional, GANA) se anticipaba desde 2010, y dominó la víspera de la apertura al proceso de elecciones.

Su divorcio del mandatario Alvaro Colom, que sus opositores calificaron como fraude, desgastó las posibilidades políticas de la administración actual -incluso antes de que la Corte de Constitucionalidad le prohibió participar.

La campaña de Torres, que resaltaba la ejecución de programas sociales, era el contrapeso de la campaña de seguridad y empleo lanzada por el principal opositor Partido Patriota (PP), y su candidato presidencial, el general retirado, Otto Pérez Molina.

El ex militar, quien resultó electo, tomará posesión el próximo 14 de enero. Sus intentos de persuasión a los votantes, alentados por el slogan de “mano dura contra la delincuencia”, flotaron sobre los 17 homicidios por día o las decapitaciones de 27 campesinos y un fiscal protagonizadas por los Zetas.

En la segunda vuelta de las elecciones, el 6 de noviembre, el general ganó sin dificultades.

Otro titular asombroso lo ocupó Gloria Torres, hermana de la ex primera dama, al ser emitida una orden de captura contra ella y sus dos hijas por estafa a dos municipalidades, a las que gestionaban créditos a cambio de una comisión, y al menos nueve acusaciones más. Una de sus hijas, Crista Castañeda, fue capturada. La hermana y Gloria Torres siguen prófugas.

Algunos analistas políticos coinciden en que 2012 será un año activo, judicialmente hablando, ya que el PP -como partido oficial- tratará de llevar a juicio a funcionarios del gobierno actual por corrupción, empezando por la ex primera dama, a quien acusan de presuntamente apropiarse de fondos destinados para programas sociales. Además, pondrá a prueba su lema de campaña de seguridad, particularmente contra el narcotráfico.

El gobierno de Mauricio Funes inició el segundo tercio del año con aplausos de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) hacia su política de seguridad alimentaria, que incluye proyectos de auto-sostenibilidad para la protección de los recursos naturales.

El Plan de Agricultura Familiar, por ejemplo, beneficia con semillas, fertilizante y asistencia técnica a 325 mil familias campesinas con cultivos de subsistencia.

Funes, quien en mayo alcanzó su segundo año de mandato, recibió un 45.7 por ciento de aprobación a su gestión, según una encuesta del Instituto Universitario de Opinión Pública, de la Universidad Centroamericana. Un 28.8% desaprueba su administración.

El rechazo obedece principalmente al estado de la economía. Sin embargo, el país importa la mayoría de los alimentos que consume y el aumento de los precios en el mercado internacional incrementaron el costo de vida de los salvadoreños.

La administración del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) intentó marcar un contrapeso con la creación del seguro agropecuario, que paga las deudas de los productores (si deben 5 mil dólares o menos) en casos de desastres naturales. Además, facilitó créditos blandos por 43 millones de dólares.

El tema económico y la seguridad (una tasa de entre 11 y 12 homicidios diarios, en promedio) han distanciado al sector empresarial del gobierno, aunque funcionarios públicos aseguran que el diálogo se mantiene.

Mientras la administración de izquierda acaba su gestión en 2014, en noviembre pasado, el Arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar, llamó al gobierno a mejorar la seguridad y aumentar la prevención del delito.

Un estudio del Banco Mundial ubica a El Salvador entre los cinco países más violentos de Latinoamérica.

Para 2012, los salvadoreños esperan una reducción en la violencia y en el costo de vida, dos robustos retos para Funes.

El país más grande del triángulo norte centroamericano cerró 2011 con augurios negativos. En el istmo, es el segundo peor calificado del istmo (después de Nicaragua) en niveles de corrupción entre 182 países evaluados por Transparencia Internacional, aunque mostró una leve mejora. Está en el puesto 129, al que subió desde el 134, que alcanzó en 2010.

Entre los casos cuestionables que se le achacan al gobierno de Porfirio Lobo están el supuesto despilfarro en la Empresa Nacional Portuaria y la expedita aprobación de decretos que conducen al mal gasto del presupuesto.

Además, seis de cada diez hondureños vive por debajo de la línea de pobreza, según el Instituto Nacional de Estadística, que atribuye la tendencia al desempleo.

Este es uno de los principales motivos por los que cerca del 40 por ciento de los centroamericanos que se refugian en la Casa del Migrante en Guatemala, por ejemplo, en ruta hacia México y EE.UU., son de Honduras. El sector empresarial reporta una caída del 12% en la inversión, en los últimos dos años, lo cual ocasionó la pérdida de unos 20 mil puestos de trabajo.

Después de una visita a Washington, D.C. en octubre, Lobo tiene al menos una previsión positiva para 2012. Su percepción de que EE.UU. posiblemente atienda su petición de ampliar en Estatus de Protección Temporal (TPS) para los migrantes hondureños.

El gobierno sandinista de Daniel Ortega prevé perspectivas positivas en la agricultura y el sector industrial, cuyo crecimiento se estima en un 10 por ciento en 2012, así como alzas en las exportaciones y atracción de empresas multinacionales para la generación de empleos.

El Banco Central prevé un crecimiento en la producción del 4% para 2012, aunque es un 0.7 menor a la proyección prevista en junio pasado.

En este contexto, la presidenta Laura Chinchilla apuesta a continuar fortaleciendo la política social, como una forma de combatir la violencia.

La economía de Panamá creció un 11.4% en el segundo trimestre de 2011.

Las previsiones de organismos internacionales -como el Fondo Monetario Internacional (FMI)- eran conservadoras, pues situaban el porcentaje en 7. Se prevé que alcance hasta un 13% y la mayor inversión se estima para 2012 y 2013.

Sin embargo, hay algunas amenazas. Las previsiones podrían nublarse ante la posibilidad de una recesión en Estados Unidos y Europa y el clima político en Panamá, después que se rompieron algunas alianzas del gobierno del Presidente Ricardo Martinelli, y si éste perdiera el control que tiene actualmente de la Asamblea.

Según analistas políticos, éste no ha sido el caso aún.

El país cerró el 2011 con el regreso de una figura histórica, aunque repudiada por muchos: el general retirado Manuel Antonio Noriega, quien enfrentará a la justicia de su país por una condena a 60 años de cárcel. Lo defenderá su hija.

En febrero, el ex militar cumplirá 22 años de haber sido sacado del país, escoltado por militares estadounidenses, que invadieron Panamá en diciembre de 1989.

Noriega estuvo preso en Miami durante 21 años por narcotráfico y un año en París, por lavado de dinero.

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