Latinos combaten enfermedades mentales
En Casita Unida Clubhouse proveen rehabilitación gratuita para latinos
Manhattan – Cuando se miró al espejo luego de vivir más de dos años en las calles y trenes de la ciudad, Rafael Medina, de 48 años, no se reconoció. El puertorriqueño, quien padece esquizofrenia bipolar, relató que su enfermedad no tratada y una excesiva soledad lo arrastraron al abandono de él mismo. Medina dijo que durante años se aisló de su familia y del mundo. “Estaba muerto, aunque seguía respirando”, indicó.
El hombre recordó los días en que nadie lo llamaba por su nombre. Dijo sentirse invisible ante los ojos de los demás.
“No sabía que estaba enfermo. No me aseaba, tenía la barba crecida y el pelo largo. Nadie preguntaba si estaba bien. Era un vagabundo olvidado en las esquinas”.
Desde hace un año, Medina asiste a Casita Unida Clubhouse, una organización para latinos que provee rehabilitación gratuita en El Barrio desde hace 11 años.
Rodeado de varios hispanos con enfermedades mentales similares, el hombre dijo haber encontrado un nuevo comienzo.
“Aquí tengo hermano, padre, madre, amigos. Ya no estoy aislado. Ahora pertenezco a un lugar, me siento amado y en paz”.
Parte de esta familia es Manuela Pérez, de 68, una paciente diagnosticada con episodios de psicosis. La residente de El Barrio explicó que desde pequeña sufrió abuso físico y abandono.
“Viví mi dolor en silencio, porque temía que ser juzgada y rechazada. No quería que me llamaran loca”.
Pérez expresó que antes de llegar a Casita Unida Clubhouse, pasó más de una década bajo tratamiento psiquiátrico en el Hospital Metropolitan.
“Me sentía inútil y vieja, pero me redescubrí. Aprendí a expresarme con el arte”.
La mujer recordó con tristeza que su madre sufría demencia. “Esperé a que me pidiera perdón por hacerme daño, pero entendí que ella no podía recordar mucho”, dijo luego de un breve silencio. “Es vital que los latinos cuiden su salud mental”, resaltó.
La peruana Eliana Maldonado, directora de Casita Unida Clubhouse, indicó que hasta la fecha la organización atiende a 360 miembros, de los cuales 65 están activos, es decir, que acuden al sitio todos los días.
Maldonado destacó que el 52% son puertorriqueños, 18% son dominicanos y el 30% restante son inmigrantes de 16 países latinoamericanos.
Del total de miembros, 63% viven solos o no tienen familia. Es el caso de William Rodríguez, de 58, quien tiene poco más de medio año asistiendo al lugar.
“No tengo a nadie. Durante 20 años viví completamente solo buscando sentirme parte de algo o de alguien”, indicó Rodríguez.
Maldonado apuntó que el 49% de miembros tienen un historial de abuso de sustancias.
Las enfermedades mentales más comunes entre los pacientes que atiende la organización destacan la esquizofrenia bipolar o paranoide, episodios de psicosis, ezquisoafectivo y ansiedad.
“Nuestro objetivo es que el paciente que ya fue diagnosticado y que tiene un tratamiento médico, se rehabilite y se integre nuevamente a la sociedad”, explicó Maldonado.
Parte del programa de Casita Unida Clubhouse -que pertenece a la organización Weston United Community Renewal- incluye entrenamiento en tareas de oficina, arte, clases de cocina y computación, terapia de grupo y actividades recreativas.