Hijo de leyenda del PAN tras presidencia
Sin el apoyo de un partido político, Manuel Clouthier se postulará
MÉXICO, D.F.- Manuel Jesús Clouthier Carrillo compara a los partidos políticos y su control del poder con el peyorativo de una granja de animales. “Cuando ha visto que un puerco suelte la mazorca”, describe para referirse a la negativa de los líderes partidistas a las candidaturas ciudadanas, la vía por la que él aspira a la Presidencia.
El hijo “Maquío”, una de las leyendas del gobernante Partido Acción Nacional (PAN) e ícono de la oposición del país fallecido en un cuestionado accidente automovilístico, pretende dar seguimiento a la lucha por la democracia que inició su padre con un abierto reto al sistema electoral mexicano.
“Si el Instituto Federal Electoral (IFE) niega mi registro ciudadano estaría atentando contra la constitución misma”, señala en entrevista con este diario en el apartamento de su madre ubicado en el Distrito Federal, donde define su plan de acción por la vía jurídica y política.
“No quiero ir por ningún partido porque de lo que se trata no es de cambiar de amo sino dejar de ser perro”, insiste Clouthier en un lenguaje que recuerda a la sátira literaria “Rebelión en la Granja”, acerca de un grupo de animales que hartos de los maltratos humanos los expulsa para luego instaurar una tiranía más represiva.
“Estoy preparado para lo que venga”, dice mientras lee un puñado de leyes y artículos que sustentan sus intenciones.
Entre ellos, el primero constitucional que garantiza “a toda persona el respeto a los derechos humanos reconocidos en la Constitución y tratados internacionales de los que el Estado Mexicano sea parte” y el 35 en la Carta Magna que detalla que “son prerrogativas del ciudadano ser votado para todos los puestos de elección popular”.
Desdeña contraargumentos de consejeros del IFE que señalan al artículo 218 de la ley interna como un impedimento porque “corresponde exclusivamente a los partidos políticos nacionales el derecho de solicitar el registro de candidatos a cargo de elección popular”.
En la Cámara de Diputados, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) echó por tierra en junio pasado la Reforma Política que pretendía las candidaturas ciudadanas, la reelección legislativa, el plebiscito y el referéndum y dejó al IFE entre un lodazal de leyes contradictorias que arrastra desde 2004.
Hace ocho años el ex canciller Jorge Castañeda peleó un registro ante el organismo electoral, las instancias legales de México y hasta la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
“Castañeda no ganó, pero dejó una plataforma lista”, señala Clouthier, de 50 años.
Este político oriundo de Sinaloa es ingeniero industrial, diputado con licencia, periodista y hombre de negocios en su tierra, donde es dueño de la empresa de hortalizas Paralelo 38, de la Impulsora de Movimientos Inmobiliarios y accionista del diario Noroeste que dirigió de 1994 hasta 2009, año en que decidió “dedicarse de lleno a la política”.
Se enroló con el partido de su padre. El PAN lo hizo diputado por representación proporcional hasta mediados de febrero pasado cuando el político renunció a ser parte del grupo parlamenteario porque el presidente del PAN, Gustavo Madero, se opuso a su registro como precandidato al Senado, ¡como si fuera su empresa!
“Se enojó porque critiqué al presidente Felipe Calderón”, afirma. “Porque dije que no combatía al crimen organizado en Sinaloa y eso es cierto, me consta porque he vivido allá, fui director de un periódico allá, donde hay un crimen organizado y una corrupción organizada”.
Su partida del PAN fue la gota que derramó el vaso. Clouthier inició su cruzada contra los partidos al anunciar el martes sus intenciones electorales por la vía libre.