4 muertos en choque de buques argentino y paraguayo
Buenos Aires, 13 de mayo.- La Prefectura Naval de Argentina halló hoy los cuerpos de cuatro de los siete tripulantes del arenero argentino que habían desaparecido este sábado después de que este buque chocara en el río Paraná con un remolcador paraguayo, informaron fuentes de la fuerza.
En la mañana de hoy, el prefecto Sergio Gaetán anunció el hallazgo del cuerpo del capitán del buque argentino “Río Turbio”, Gustavo Caracciolo, y horas más tarde aseguró que la Prefectura encontró los cadáveres del primer oficial, Ramón Rodríguez, del timonel Marcelo Córdoba y del jefe de máquinas, Felipe Aguirre.
La policía costera aún busca a los restantes tres desaparecidos, que han sido identificados como Cristian Marmet, José de la Fuente y Luciano Luna, todos ellos argentinos.
El buque arenero “Río Turbio”, que permanece hundido, había salido de la ciudad bonaerense de San Pedro y fue chocado por el barco paraguayo “Ava Payagua” en el kilómetro 102 del río Paraná, a la altura de la ciudad bonaerense de Zárate.
La Prefectura Naval ha detenido a tres paraguayos, el capitán, el timonel y una persona encargada de las maniobras, del “Ava Payagua”, en el que viajaban doce personas.
Asimismo, este sábado logró rescatar a uno de los ocho tripulantes del barco argentino, quien se encuentra en buenas condiciones de salud.
“Según parece, el buque paraguayo se desgobernó, se vino encima y chocó al argentino, que como es arenero venía cargado y se hundió rápidamente”, informó Juan Carlos Pucci, secretario general del gremio de trabajadores fluviales.
“Queremos denunciar a todos los armadores paraguayos porque las condiciones en que navegan, a nuestro entender, no son las mejores”, aseguró por su parte el delegado de ese gremio Leonel Vázquez.
Dijo que “hace tiempo” que vienen denunciando esta situación y sostuvo que (los barcos paraguayos) “siempre tienen algo que ver con los choques”.
Según se informó, la ministra de Seguridad de Argentina, Nilda Garré, supervisa la asistencia y rescate de los tripulantes del arenero, que dio una vuelta de campana.