Cuba da último adiós a Teófilo Stevenson
Stevenson pasó a la historia como tricampeón olímpico gracias a su derecha demoledora.
La Habana, 12 de Junio.- Conmovida y con gran pesar, Cuba dio hoy su último adiós a la leyenda del boxeo Teófilo Stevenson Lawrence, tres veces campeón mundial y olímpico, fallecido el lunes en La Habana por causa de un infarto.
Familiares procedentes de la provincia oriental de Las Tunas, donde nació hace 60 años, dirigentes deportivos, atletas, amigos y admiradores acudieron al velorio y entierro de Stevenson en La Habana, donde la despedida del duelo correspondió al presidente del Comité Olímpico Cubano, José Ramón Fernández.
Ofrendas florales del expresidente cubano, Fidel Castro, de su hermano y sucesor, Raúl Castro, y del mandatario de Venezuela, Hugo Chávez, se encontraban entre las enviadas al funeral del gigante campeón de los cuadriláteros.
“Ningún otro boxeador amateur brilló tanto en la historia de ese deporte. Podría haber obtenido dos títulos mundiales adicionales, si no hubiese sido por deberes que los principios internacionalistas impusieron a la Revolución. Ningún dinero del mundo habría sobornado a Stevenson”, escribió hoy Fidel Castro en un breve artículo de su serie “Reflexiones” en memoria del fallecido exdeportista.
Medios de prensa locales e internacionales destacaron en sus titulares hoy la muerte de Stevenson y elogiaron su papel en la historia del deporte universal como uno de los más grandes boxeadores aficionados de todos los tiempos.
Sus contundentes victorias en el ring, su demoledora pegada, técnica depurada, limpieza en el combate y estilo elegante, aparecen destacadas en artículos y comentarios de quienes lo admiraron.
“Teófilo fue un caballero sobre el cuadrilátero, un amigo, un gran hijo, buen hermano y gran padre”, afirmó un artículo publicado en la web oficial ‘Cubadebate’.
Comentarios al margen resaltaron que “su figura esbelta de mulato cubano no se apagará. Presentes y futuras generaciones se encargarán de mantenerlo vivo y su estirpe de campeón conducirá a los púgiles que vendrán”.
También resaltaron “el corazón noble de Teófilo Stevenson no alcanzó la medalla en este último combate” y afirmó que “la gloria que fue su vida, es ya eterna”.
Conocido popularmente como ‘Pirolo’ o ‘el Gigante del Central Delicias’, en alusión a la localidad de la provincia oriental de Las Tunas donde nació el 29 de marzo de 1952, Stevenson ganó todos los títulos de la Asociación Internacional de Boxeo Aficionado (AIBA).
Stevenson siguió los pasos como amateur de boxeadores como Cassius Clay, George Foreman, Ken Norton o Laszlo Papp, fue campeón mundial de los pesos semipesados en 1969, pasando a la categoría máxima un año después, para proclamarse campeón del Caribe en 1970.
Los primeros Panamericanos en los que participó fueron en Cali en 1971, pero logró su primer oro en estas justas en el peso completo, en México’75.
Tenía entonces solo 25 años cuando se coronó por primera vez campeón olímpico en Múnich ’72 y mundial, y desde entonces no dejaría de acumular títulos que le convirtieron en el mejor púgil aficionado de la historia- Montreal ’76, San Juan ’79 y Moscú ’80 y varios mundiales.
También fue triple campeón como mediano y mediano ligero y tricampeón mundial en la Habana 1974, Belgrado 78 y Reno 86.
En su brillante trayectoria se suman los títulos de bicampeón centroamericano y del Caribe en 1974 y 1982, seis veces campeón de los centroamericanos de boxeo entre 1970 y 1977.
Se destacó por la potente pegada de su derecha que según los especialistas definió la mayoría de los combates en el cuadrilátero.
Después de la formidable victoria en el mundial de Reno, Estados Unidos, en 1986, el gran campeón isleño decidió retirarse y se despidió en julio de 1988 durante el torneo internacional de boxeo Giraldo Córdova Cardín.
En su palmarés se registran 301 victorias en 321 combates celebrados a lo largo de 20 años sobre el ring y solo tuvo 20 derrotas, dos de ellas ante el ruso Igor Visotski.